Tras su reunión con Pedro Sánchez este miércoles por la noche, Pablo Iglesias ha sido entrevistado en El programa de Ana Rosa en Telecinco en la que lo primero que ha hecho ha sido justificar la falta de transparencia de su reunión con el líder del PSOE.
Poco después, también ha defendido que la marca blanca de su partido en Pamplona, Aranzadi-Pamplona en Común, apoye a los proetarras de EH Bildu para desbancar de la alcaldía a la fuerza más votada, UPN. Iglesias ha alegado que le "parece de vergüenza que en este momento alguien se atreva a utilizar la memoria de las víctimas" para decir "a quién ponemos de alcalde". Y ha insistido después lamentando que los "corruptos" puedan utilizar un "terrible sufrimiento" para criticar los pactos.
Según ha indicado, "cualquiera que se tenga que poner de acuerdo con nosotros tiene que respetar los derechos humanos, y condenar y rechazar cualquier fórmula de violencia y creo que eso ha estado claro", ha afirmado el líder de Podemos, pese a que Bildu sigue sin condenar el terrorismo.
A su juicio, "en Pamplona lo que ha hecho UPN, lo que significó el Gobierno de Barcina y lo que significó estafar a todos los navarros con las famosas cajas de ahorros y con niveles de corrupción escandalosos con las famosas dietas creo que ha implicado que la gente vote de otra manera". Tras ello, Iglesias ha censurado que "corruptos y sinvergüenzas en Navarra se atrevan a utilizar la memoria de las víctimas para decir yo tengo que ser alcalde; mire, usted es un sinvergüeza", ha repetido el líder de Podemos.
Defiende el secretismo en su reunión con Sánchez
Sobre su reunión con Sánchez, ha explicado que cenaron en un hotel, y más concretamente "en un reservado para estar cómodos". Reservados a los que hasta hace unas semanas Pablo Iglesias había criticado. "Pedí una tortilla francesa, ensalada y pescado", ha desvelado Iglesias, que ha defendido el "secretismo" que rodeó este encuentro para evitar que la prensa les molestase: "Lo único que no se sabía era el lugar y la hora, porque estaríais allí", ha indicado con respecto a los medios.
Según Iglesias era la primera vez que se reunían y por ello necesitaban estar "solos". Asimismo, ha indicado que "no acordamos nada, porque no nos corresponde", pero que ambos dirigentes pusieron "encima de la mesa las líneas rojas" que tienen Podemos y el PSOE.
Pablo Iglesias también ha hablado del cambio que se ha producido en su percepción del líder socialista: "Pedro me pareció un tipo majo y cordial", ha dicho el líder de Podemos, que ha indicado que Sánchez le reveló una anécdota de la reunión con Mariano Rajoy que había mantenido por la mañana: "Me dijo que los periodistas le seguían antes de llegar a Moncloa" y que "no tenía ninguna intención de pactar con el PP".
Y también ha aprovechado la entrevista para cargar contra el Partido Popular. "Al PP la ciudadanía le importa poco, nosotros le preocupamos mucho más", ha dicho Iglesias, que también ha arremetido contra Ciudadanos: "Nosotros estamos a favor de gobiernos que planteen un cambio profundo y sean duros con la corrupción. Contra la corrupción hay que intervenir en el sistema económico y Ciudadanos sólo quiere redactar un código ético" al respecto.
Iglesias también se ha referido a su expareja, Tania Sánchez, de la que ha dicho que tiene su "máximo apoyo".