Un grupo de policías dispone de documentos internos de la familia Bárcenas que nunca han sido entregados al juez, según denuncia este lunes El Español y recoge Efe.
El diario dirigido por Pedro J. Ramírez ha tenido acceso a manuscritos, extractos bancarios e información contable "que está siendo utilizada durante los últimos meses como arma arrojadiza por parte de una facción de la Policía contra otra". Estos documentos incluyen anotaciones comprometedoras para el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, como una que reza textualmente: "Pagos obra en casa de Mariano".
Los "bandos" policiales enfrentados, según este diario, son el encabezado por "el comisario Marcelino Martín Blas, exresponsable de la Unidad de Asuntos Internos, y el del comisario José Manuel Villarejo, adscrito a la Dirección Adjunta Operativa".
Los primeros acusan "de forma soterrada" a los segundos "de haberse apoderado ilegalmente de estas pruebas utilizando como coartada una operación encaminada a encontrar el dinero oculto del ex tesorero del PP". Por su parte, el "bando" de Villarejo "atribuye al primero la comisión de estas ilegalidades con objeto de favorecer al Gobierno del PP".
El Español asegura haber "cotejado" su veracidad con la familia Bárcenas, cuyos miembros, agrega, "reconocen como suyos los documentos y coinciden en que se trata, en su mayoría, de material custodiado en su domicilio y que forma parte de su estrategia de defensa".
En la reyerta policial se intenta atribuir la autoría de las posibles ilegalidades a Villarejo, al que se acusa de haberse extralimitado en la denominada Operación Kitchen. En dicho operativo fueron captados como informadores miembros del entorno de la familia. Entre el cruce de acusaciones hay que situar también la de que estas maniobras estarían dirigidas por altos cargos del PP.
El pasado 29 de mayo, el Tribunal Supremo archivó la denuncia del comisario José Manuel Villarejo Pérez contra el expresidente de la Comunidad madrileña, Ignacio González, en relación con las acusaciones públicas de extorsión policial que hizo el político, ya que cree que no hubo delito.
El pasado mes de marzo, en una comparecencia informativa, Ignacio González denunció haber sufrido un intento de "extorsión" policial para que retirara las denuncias por la investigación sobre el ático que posee en Estepona (Málaga).