Revelaban secretos a la trama y recibían jamones, entradas para el fútbol, cajas de vino o incluso un viaje en clase especial desde Pekín. La Fiscalía señala a siete miembros de los cuerpos de seguridad por delitos de revelación de secretos, tráfico de influencias y cohecho. Se trata de seis policías nacionales, entre ellos dos comisarios, y un agente de la Policía Municipal de Fuenlabrada cercanos a Gao Ping, propietario de numerosas naves en el polígono industrial Cobo Calleja. Apunta también a uno de sus máximos colaboradores.
Deben ir a la cárcel, según el informe de acusación de Anticorrupción. El Ministerio Fiscal pide penas de entre uno y siete años de prisión y multas de hasta 17.000 euros. Son las conclusiones sobre la pieza separada del caso Emperador, destapada a raíz de una operación a gran escala contra el blanqueo de capitales a través de redes de negocio asiáticas. En esta vertiente se determina si Ping logró orientar la voluntad de los agentes.
Revelación de secretos
El comisario Manuel Patricio Rodríguez y los policías nacionales Blas Donoso y Óscar Francisco García se enfrentan a cinco años de cárcel, inhabilitación absoluta de doce años y suspensión de empleo público durante los tres primeros por revelación de secretos y cohecho. Se habrían aprovechado de sus cargos para filtrar contenido de las bases de datos privadas, por ejemplo, en relación al estado de renovación de la tarjeta residencial de un familiar del empresario chino.
Para el comisario Ángel Luis Olmedo pide tres años de prisión, suspensión durante tres años e inhabilitación absoluta por diez por revelación de secretos y cohecho. Por este último, solicitan para los inspectores Miguel Ángel Gómez y Federico Sánchez un año de cárcel y suspensión de empleo durante tres. Destacan entre las atribuciones la entrega de documentación relativa a las naves cerradas en el polígono donde se ubicaba la mafia.
El policía local de Fuenlabrada Mario José Selas podría ingresar siete años por revelación de secretos, cohecho y tráfico de influencias, mientras que el entonces jefe de prensa del Ayuntamiento de Coslada y asesor del alcalde Pablo García se enfrenta a tres años de cárcel por los dos últimos delitos. La máxima petición alcanza los siete años de prisión y se dirige contra Yongping Wu Lui. El conocido como Miguel ‘El Calvo’ es uno de los máximos colaboradores de Gao Ping y habría cometido revelación, cohecho y otros dos delitos de tráfico de influencias.
Regalos y pagos
Según la petición, el magistrado de la Audiencia Nacional, Fernando Andreu, decidirá si abre juicio oral contra los acusados. En el informe aparece detallada una larga lista de regalos que habrían recibido: un jamón, cajas de vino, entradas para los toros, invitaciones para partidos de fútbol en el Santiago Bernabéu y el Vicente Calderón, bolsos...A cambio, Manuel Patricio se ofreció a presentar al conseguidor Yongping a un concejal de Urbanismo de Coslada.
Óscar García no solo habría recibido obsequios sino que, según Anticorrupción, llegó a exigir un vuelo en clase business desde Pekín a Madrid valorado en más de 4.000 euros. De las inspecciones a la competencia se habría encargado el agente de Fuenlabrada. Mario Selas logró cien pendrives a buen precio para un curso de jueces y policías.
La operación Emperador estalló en octubre de 2012 con la detención de 83 personas. Entre los arrestados figuraban el actor porno conocido como Nacho Vidal o el exconcejal de Seguridad de Fuenlabrada.