Tras dos semanas en silencio como protesta por el cese de Sergio Pascual, Iñigo Errejón ha reaparecido este martes en una rueda de prensa en el Congreso de los Diputados con un discurso con el que ha intentado escenificar una tregua con Pablo Iglesias de cara a la reunión que mantendrá el líder de Podemos con Pedro Sánchez este miércoles.
Eso sí, aunque ha tratado de mantenerse en la moderación, Errejón sí que ha asegurado que no comparte "todas las decisiones de mi secretario general", mostrando su especial disconformidad con el cese de Pascual. "Es obvio que yo no la comparto", ha repetido hasta en tres ocasiones. "Manifesté que no estaba de acuerdo, seguimos trabajando juntos pero no comparto todo lo que hace. Es evidente que ha habido tensiones organizativas", ha insistido Errejón.
Dicho esto, lo que no ha querido hacer Errejón ha sido criticar la decisión de Iglesias de proponer al aragonés Pablo Echenique como sustituto de Pascual. "Me parece una propuesta de consenso que desmadrileñiza un poco la construcción organizativa", ha asegurado.
Errejón también ha tenido que hacer referencia a sus dos semanas de silencio. El portavoz parlamentario de Podemos ha señalado que "este tiempo" le ha "servido también para una elevación de miras". "No han sido semanas sencillas y creo que quedan discusiones pendientes. A mí me ha servido levantar la mirada. Han sido días de reflexión y de trabajo para desbloquear la situación. No han sido semanas fáciles, no digo para mí, pero salimos habiendo madurado", ha zanjado.
Unos días que le han servido también le han servido para preparar su intervención el próximo sábado en el Consejo Ciudadano de Podemos. Allí se mostrarán las principales diferencias entre Iglesias y Errejón. El número dos de Podemos ya ha avisado que defenderá un modelo "federal", es decir, restarle poder al líder del partido.
Abre la puerta al apoyo de Ciudadanos
Durante la rueda de prensa, Errejón también ha tratado los futuros pactos de Gobierno. Y ha sido aquí cuando el número dos de Podemos ha marcado una diferencia con el discurso habitual de Podemos y no ha rechazado de forma tajante la hipótesis de un gobierno con el PSOE en el que esté Ciudadanos.
Preguntado por si estarían dispuestos a entrar en un gobierno en el que esté Ciudadanos, Errejón ha evitado responder con un no tajante y ha asegurado que "aún no hemos recibido la propuesta en firme, cuando la recibamos lo valoraremos".
Lo que sí ha hecho el líder de Podemos han sido varios matices. El primero que ese posible gabinete tendría que ser "coherente", algo que ha asegurado le parece "complicado" que eso se consiga. "No se puede contentar a los dos", ha asegurado en referencia al partido de Albert Rivera y al suyo.
Una postura no tan tajante, por ejemplo, como la mantenida por el portavoz catalán de Podemos, Xavier Domènech, que este mismo martes dejaba nítidamente claro que no entrarían en ningún gobierno con Ciudadanos, que ni siquiera valorarán esa hipótesis. "En un gobierno a la valenciana no está Ciudadanos", aseguraba.
No "ve mal" es que "C's apoye" ese gobierno
Errejón, por su parte, poco después, intentaba rebajar sus declaraciones en Twitter dejando a un lado un gobierno conjunto pero si precisando que lo que "no ve mal" es que "Ciudadanos apoye" ese gobierno a la valenciana.
Lo hemos dicho muchas veces: no vemos mal que Ciudadanos apoye o se abstenga en un gobierno a la valenciana.
— Íñigo Errejón (@ierrejon) 29 de marzo de 2016