Miles de personas han participado este sábado en Madrid en la marcha del Orgullo Gay 2016, que ha partido pasadas las 18:30 horas de la glorieta de Atocha, en Madrid, con dos pancartas en su cabecera, una a favor de las "leyes por la igualdad, !ya¡", y otra con motivo de celebrarse el Año de la Visibilidad Sexual en la Diversidad.
A los miembros de la Federación Estatal y del Colectivo de Lesbianas, Gays, Transexuales y Bisexuales (LGTB) se han unido representantes de diversos partidos y colectivos sociales a excepción del PP, que no fue invitado a unirse a la cabecera porque sus "guiños" hacia el colectivo, según los organizadores, no habían sido suficientes.
Aunque la presencia de políticos no fue tan nutrida como el año pasado, al que acudieron, entre otros, Pedro Sánchez y Pablo Iglesias, sí han estado miembros de diversos partidos pertenecientes, casi todos, a la política regional.
La excepción ha sido Íñigo Errejón, presente en la marcha. El secretario Político de Podemos ha celebrado que lo que empezó siendo "una reivindicación de gente valiente", a fuerza de insistir y de sumar gente "se ha convertido en una fiesta de orgullo para nuestro país".
"Somos de los países menos homófobos del mundo", ha añadido sin recordar lo que ocurre en otros países amigos de su partido. Además, ha instado a seguir caminando, a "ampliar y mejorar" la ley de identidad transexual, y a desarrollar una ley contra la LGTBIfobia "que cuide la ampliación de derechos también en espacios opacos como el mundo del deporte, las Fuerzas Armadas o el mundo laboral".
El portavoz socialista en la Asamblea de Madrid, Ángel Gabilondo, ha recordado la figura de Pedro Zerolo, cuya memoria se "traduce" en las políticas socialistas.
Begoña Villacís, portavoz de Ciudadanos en el Ayuntamiento de la capital, ha pedido "libertad y respeto" y ha asegurado que hoy lo que toca es "celebración".
Cristina Cifuentes, muy crítica con el veto de los organizadores a los populares en la cabecera de la marcha, finalmente no ha asistido. En su lugar, han acudido varios consejeros, como Carlos Izquierdo, de Asuntos Sociales, que ha defendido que la presencia del PP evidencia la "apuesta muy importante por la tolerancia y la igualdad de oportunidades para todos" de la formación.
La alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, y el consejero de Presidencia de la Comunidad, Ángel Garrido, han sido los encargados de recibir a la cabecera de la manifestación al término de su recorrido.
Garrido ha defendido el compromiso del Gobierno de Cristina Cifuentes en la defensa de los derechos del colectivo LGTBI y ha garantizado que el próximo año, cuando se celebre el World Pride, la presidenta estará a la cabeza "del mejor orgullo mundial de toda la historia".
Manuela Carmena, por su parte, ha subrayado que Madrid ha sido la cuna del colectivo LGTBI y la ciudad "os abraza, y quiere ser siempre vuestro escenario". "Soy la alcaldesa de la ciudad más grande del Orgullo", ha dicho Carmena, que ha pedido luchar contra la intolerancia en unos momentos en los que preocupan los "brotes pequeños de homofobia" que se han producido recientemente. Por eso, ha seguido diciendo, el reto del Ayuntamiento es "que no haya nadie contra el movimiento gay".
Y para el año próximo, el "reto enorme" es que detrás del Ayuntamiento y de la Comunidad esté "toda España" para que el día del Orgullo Mundial sea "algo único".