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Teresa Rodríguez aparta del primer plano a los errejonistas andaluces de Podemos

El desgaste de Susana Díaz y la sistemática vinculación del PSOE andaluz con la corrupción no favorecen a Podemos.

El desgaste de Susana Díaz y la sistemática vinculación del PSOE andaluz con la corrupción no favorecen a Podemos.
Teresa Rodríguez | EFE

Las movidas internas de Podemos también tendrán repercusiones en el grupo parlamentario en Andalucía. Después de que Pablo Iglesias haya apartado a Íñigo Errejón de la portavocía del Congreso y haya optado por un discurso más duro con Irene Montero, Teresa Rodríguez sigue sus pasos en Andalucía.

Si Pablo Iglesias venció, tras el encuentro de Vistalegre II, a Íñigo Errejón en el plano nacional, Teresa Rodríguez derrotó, por un margen más amplio todavía, a los errejonistas andaluces, que fueron incapaces de fraguar una lista común. El resultado fue casi 80 a 20 a favor de la actual líder andaluza de Podemos que, ahora, comienza a aplicar su victoria.

El próximo sábado, 11 de marzo, Teresa Rodríguez aplicará una "purga" suave haciendo que su adversaria errejonista, Carmen Lizárraga, deje la presidencia del grupo parlamentario andaluz que consta de 15 escaños y a Esperanza Gómez, igualmente errejonista, deje de ser la coordinadora del dicho grupo parlamentario. Lo de "suave" se deriva de que ninguna de las dos dejará de ser portavoz de área.

Recuerda Diario de Sevilla que ambas pertenecen al sector más preparado de Podemos, conocido como el de "los ilustrados". Carmen Lizárraga es profesora de Economía en la Universidad de Granada y Esperanza Gómez es profesora de Derecho Constitucional en la Universidad de Sevilla. Junto a ellos, los "ilustrados" de Podemos pertenecientes al sector errejonista cuentan con Alberto Montero, el profesor universitario malagueño que contrató a Íñigo Errejón en la Universidad de Málaga, y la diputada nacional Auxiliadora Honorato.

Recuérdese asimismo que los críticos errejonistas de Teresa Rodríguez estaban de acuerdo con su propuesta de federalizar el partido en Andalucía, para que la organización en el Sur adquiriera una autonomía próxima a una independencia de la organización nacional, algo que Pablo Iglesias frustró en Vistalegre II.

Los "ilustrados" acusaron a Teresa Rodríguez de un déficit democrático en la convocatoria del congreso podemita durante la campaña interna de las primarias que dieron la victoria a la roteña. De hecho, los errejonistas presentaron tres listas diferentes que contribuyeron a su derrota mientras se oponían a la "agrarización" de Podemos y la presencia de Diego Cañamero en las listas.

Según diversas fuentes, el onubense Jesús Romero, ayudante de Documentación en Canal Sur TV, será el nuevo presidente del Grupo Parlamentario mientras que el cordobés David Jesús Moscoso, doctor en Ciencias Políticas, el nuevo coordinador del grupo parlamentario. Naturalmente, ambos son miembros de la corriente anticapitalista que representa Teresa Rodríguez.

Teresa Rodríguez no logra avanzar

A pesar de su proyección pública tras haber sido agredida por el empresario dirigente de la Cámara de Comercio de Sevilla, Jesús Muñoz Medina, ahora acusado de atentado a la autoridad y delito sexual por la Fiscalía, y de su alianza táctica con Pablo Iglesias en el último cónclave de Vistalegre II, del que no sacó rédito político en lo referente a la autonomización radical del partido en Andalucía, Teresa Rodríguez no logra despegar en las encuestas.

El desgaste de la figura de Susana Díaz y la sistemática vinculación del PSOE andaluz con la corrupción y las irregularidades parecían aportar terreno abonado para que Podemos avanzara de manera clara en las encuestas. Sin embargo, en las últimas conocidas, la organización andaluza de Podemos se estanca, a la baja, mientras, por si fuera poco, Izquierda Unida desciende en apoyo electoral de manera clara.

En la más importante de ellas por su volumen de encuestas, Egopa, publicada en enero de este año, el PSOE-A volvía a ser el partido más votado de celebrarse elecciones autonómicas en Andalucía, con el 28,6 por ciento de los votos. El PP le pisaba los talones situado a una distancia de sólo 2,4 puntos. Podemos, estancado respecto a los resultados de 2016, obtenía el 17 por ciento; Ciudadanos, un 12,1 por ciento, e IULV-CA, el 5,7 por ciento. Sin embargo, en unas hipotéticas elecciones generales, ganaría el PP y Podemos descendería levemente.

En el sondeo realizado por la consultora Betens Comunicación para el PP a finales de enero, PP y PSOE exhibían un empate técnico de celebrarse elecciones andaluzas en ese momento, Ciudadanos ganaría 4 escaños y Podemos e Izquierda Unida perderían un escaño cada uno en el Parlamento andaluz.

En la encuesta realizada por Celeste Tel hace unos días el PSOE salía claramente beneficiado el PSOE, que sacaba diez puntos al PP, mientras que Ciudadanos ganaba un escaño y la izquierda radical, Podemos e IU, perdía tres.

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