El diputado de ERC, Gabriel Rufián, dice en una entrevista concedida a Vanity Fair que su primer apellido le "ha puesto la piel muy dura" y que prefiere "parecer bruto y que se me entienda que pasar desapercibido".
El político secesionista señala que la derecha catalana es más democrática que la del resto de España –"la del Valle de los Caídos"- porque "hay tabúes que los catalanes hemos superado". "Por ejemplo –añade–, el lío que se armó cuando no fuimos a la rueda de consultas con Felipe VI en protesta porque él no recibió a Carme Forcadell cuando fue a comunicarle el nombramiento de Carles Puigdemont".
Rufián dice que Jordi Pujol "nunca fue independentista" y que quizás sea "un producto de España más que de Cataluña". Acto seguido, afirma que el periodismo catalán es "más crítico" que el de Madrid. "¿Niega que en Cataluña también haya una prensa muy afín a quienes gobiernan la Generalitat?", pregunta la entrevistadora. Responde el entrevistado: "Es cierto, no lo puedo negar, pero sí digo y, soy objetivo, que aquí aún no tenemos un Federico Jiménez Losantos".
Además, el diputado de ERC cree que "TV3 es un poco mejor que la tele pública española, algo que no es difícil pues su programa más político de TVE hasta hace poco era el de Bertín Osborne".
Rufián elogia a Carles Puigdemont –"se le entiende y eso me parece primordial"– y a Santi Vidal –"un buen hombre" y "un buen político"– y carga contra Podemos en Cataluña y Barcelona en Comú, a quienes tilda de "cobardes". El diputado secesionista lamenta que "gente como Domènech, Lluís Rabell o Joan Coscubiela no creen que merezcamos liderar este proceso de cambio" por "etnicismo social". "Creo que es porque saben que podría gobernar una Comunidad Autónoma pero no una república catalana. Son tacticistas".