Carme Forcadell y el resto de miembros separatistas de la Mesa del Parlament no harán el paseíllo ante las puertas del juzgado como mínimo hasta dentro de un año o año y medio. Se evitará, por tanto, dar una excusa para que los partidos del referéndum exhiban la imagen de Forcadell como nueva "víctima de la operación Cataluña" en medio del referéndum o una elecciones autonómicas anticipadas.
La primera denuncia contra Carme Forcadell se interpuso en octubre del año pasado, después de que la presidenta de la cámara autonómica permitiera la votación de las conclusiones de la comisión parlamentaria del "proceso constituyente". El pasado febrero, cuando la magistrada María Eugenia Alegret estaba a punto de concluir la causa, se interpuso una segunda querella por prevaricación y desobediencia que ampliaba la lista de investigados a otros cuatro miembros de la Mesa, los convergentes Lluís Corominas y Ramona Barrufet, y la republicana Anna Simó.
La magistrada unió la nueva denuncia al expediente que ya tenía abierto sobre Forcadell, lo que permitió ampliar de suyo el plazo de la investigación, que en el ámbito penal es de seis meses. Ahora, con la nueva petición fiscal, la instrucción puede alargarse hasta dieciocho meses. Alegret aún debe tomar declaración a los nuevos investigados. Forcadell, por su parte, ya declaró ante la magistrada el pasado diciembre.
Fuentes judiciales apuntan a que Alegret admitirá la petición fiscal de "causa compleja" para evitar una movilización ante las puertas del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) similar a la que organizaron la Generalidad y los partidos separatistas para arropar a Artur Mas al comienzo de su juicio, así como la campaña de desobediencia con la que amenazaron los líderes de proceso si Forcadell resulta inhabilitada.
Precisamente este jueves, los expresidentes del parlamento catalán protagonizaron un acto de apoyo a Forcadell en el que el presidente de la Generalidad, Carles Puigdemont, afirmó que "si la inhabilitan a ella nos inhabilitan a todos" y animó a defender la vigencia del proceso. En la tradicional carta que el presidente autonómico catalán envía a los funcionarios con ocasión de la "Diada de Sant Jordi" insiste en que el proceso se llevará a cabo "a la catalana, de forma democrática, responsable y en positivo".
Recogida de firmas...
Por su parte, el "Pacte Nacional pel Referèndum" ha presentado este jueves su plan de recogida de firmas para la celebración de la consulta. Contará con cuatro mil voluntarios que se distribuirán en unos mil puntos de Cataluña el domingo, festividad de San Jorge, y el próximo 1 de mayo a petición de los sindicatos.
...y manifiesto conjunto
Además, el gobierno de la Generalidad presentará este viernes un manifiesto conjunto del presidente y sus consejeros con el que se pretende reforzar la unidad de ERC y el PDeCAT (la vieja Convergencia) tras episodios como la negativa del líder de ERC y vicepresidente autonómico Oriol Junqueras a firmar la orden para comprar las urnas o la filtración de una conversación en la que el número dos convergente, David Bonvehí, teorizaba sobre la opción de nombrar un candidato "autonomista" si no hay consulta y el proceso acaba en "desastre".