Las campañas de acoso contra los agentes de la Guardia Civil destinados en la localidad de Oñate, en Guipúzcoa, no cesan. Un año más, el entorno batasuno del municipio ha convocado una jornada denominada "Fan Hemendik Eguna" o "Día del Fuera de Aquí" con el objetivo de presionar a los agentes para que abandonen la localidad. Un acto que se encuadra dentro del objetivo del entorno de ETA de que las Fuerzas de Seguridad del Estado abandonen el País Vasco y Navarra.
Los actos de acoso se realizarán durante toda la jornada del sábado, coincidiendo con la celebración de las fiestas patronales de la localidad, y darán comienzo a las 11.30 horas de la mañana en la plaza principal de Oñate. El acto central, el quinto del día, tendrá lugar a las 20:00 horas en el mismo escenario que el primer acto del día, y será una concentración en la que se pedirá la salida de las Fuerzas de Seguridad de la localidad y se hará la representación de un desarme.
Toda la parafernalia cuenta con el apoyo del ayuntamiento de la localidad, gobernado con mayoría absoluta por EH Bildu, la coalición electoral que sirvió para dar cobijo a los herederos de Batasuna-ETA hasta que volvieron a ser legalizados bajo las siglas de Sortu, partido que quedó de facto integrado en esa alianza de partidos. EH Bildu tiene 10 de los 17 concejales que conforman la corporación. Los otros siete pertenecen al PNV.
Las asociaciones profesionales de la Guardia Civil han mostrado en las últimas horas su malestar hacia un acto de acoso que empieza a convertirse en tradicional ante la pasividad de las estructuras judiciales del Estado. "Se va a escenificar una nueva pantomima para intentar amedrentar y amenazar a los guardias civiles destinados en Oñate, así como a sus familias, mujeres e hijos", denuncian desde la Asociación Española de Guardias Civiles (AEGC).
"Se verán señalados y vejados por los herederos del terror y la intransigencia terrorista. No es que queramos ponernos la tirita antes de tener la herida, es que sabemos lo que ocurrirá porque ellos mismos –en alusión a los batasunos– lo han anunciado. Por eso, como conocemos hechos anteriores y como sabemos que nadie hará nada por remediarlo, queremos que nuestros compañeros, al menos, se sientan arropados por el resto de guardias civiles", continúan.
Esta asociación, con representación en el Consejo de la Guardia Civil, acusa al Ministerio del Interior de "inacción y pasividad" y recuerda asimismo que el año pasado ni la policía local ni la Ertzaintza protegieron el cuartel de la localidad y que los batasunos lanzaron botes de humo que se introdujeron en el interior del recinto.
Por su parte, la Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC) ha denunciado que "estamos ante una lamentable tradición por la que se trata de intimidar a los agentes y sus familias" y ha asegurado que "desde hoy –este viernes– ya se percibe este ambiente de intimidación en esta localidad, al haberse colocado en la plaza distinta iconografía alusiva al afán expulsar a los guardias civiles del País Vasco".
"Queremos instar al Ministerio del Interior, la Subdelegación del Gobierno en Guipúzcoa y a la Fiscalía a que se extreme la vigilancia de este acto de acoso, con el fin de detectar posibles actitudes que pudieran ser constitutivas de delito", explican desde la asociación, que creen que el Ministerio del Interior "ha dejado literalmente tirados" a los agentes de Oñate.