
El presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, provocó esta Nochebuena la indignación de sus vecinos al entrar con su coche por una calle en dirección contraria.
El presidente cántabro se adentró en Peña Herbosa, una de las calles más céntricas y concurridas de Santander, que cuenta con una gran cantidad de bares y locales. Revilla preguntó a los vecinos si la calle era "dirección prohibida". Estos le respondieron preguntando a su vez si iba "cocido" e increpándole "que sople, que sople".
Además, según recoge El Comercio, justo antes del incidente, el presidente de Cantabria había compartido en su perfil de Facebook un vídeo en el que decía que se había bebido un chupito de orujo de Liébana para cantar un villancico con su hija: "Mi hija Lara y yo os queremos dedicar este villancico deseando a toda España que hayáis tenido una gran noche, una Feliz Navidad y un próspero Año Nuevo".