Esta semana Santiago Abascal ha sido reelegido líder de VOX en un acto que llenó el teatro La Latina de Madrid. Abascal ha contado en Es la Mañana que el partido vive su mejor momento en cuanto a "cohesión" y "números de afiliados". Además, ha puesto como ejemplo los diferentes viajes que realiza por España para acudir a "actos a los que antes sólo acudían 40 personas y ahora los abarrotan más de 700 como pasó hace poco en Jaén".
Santiago Abascal ha subrayado los puntos sobre los que se basa su partido, "la defensa de la nación y el imperio de la ley, luchar contra el expolio fiscal, defender la familia y la dignidad, fomentar la libertad para emprender, para interpretar nuestra historia…". Precisamente en este punto ha anunciado que si gobernara derogaría la Ley de Memoria Histórica.
Ante unas elecciones, ha dicho que VOX tendría muchas opciones, independientemente de si Rajoy sea el candidato o no, porque "el PP ha perdido credibilidad, han engañado durante demasiado tiempo". Frente al PP, ha añadido, "VOX aporta crédito, autenticidad y claridad, en casi todos los terrenos, incluso aquellos en los que los políticos no se quieren mojar". De hecho, ha apuntado, "nosotros nos posicionamos hasta mancharnos".
Relaciones con la extrema derecha europea
Ante las preguntas por sus reuniones con partidos como el Frente Nacional de Marine Le Pen ha querido aclarar que "aquellos encuentros los decidimos tras consultar a los afiliados, que votaron afirmativamente más de 70%". Sin embargo, ha reconocido que quizás no supieron explicar los "puntos de coincidencia y los de diferencia".
En este sentido, ha puesto como ejemplo el proteccionismo que defienden partidos como el Frente Nacional. "Eso es lo que nos aleja de ellos, nosotros nunca hemos planteado la salida de la UE ni hemos apostado por el cierre de fronteras". No obstante, no quita para que por ejemplo quieran replantear la UE para que deje de ser una "burocracia con un parlamento mastodóntico donde sólo mandamos a los dinosaurios políticos y que está alejada de los ciudadanos".
Abascal ha querido dejar claro que aquellos encuentros no suponen "una identidad política" y ha subrayado que "VOX sólo responde a los intereses de la nación española" como quedó patente "cuando criticamos duramente a la Liga Norte por posicionarse al lado de los separatistas en Cataluña".
El encuentro con Marine Le Pen ha dicho que "seguramente" lo volvería a repetir ya que "el Frente Nacional no es lo que nos han dicho en España que es". Eso sí, ha querido diferenciar el Frente Nacional de Marine Le Pen, con la que sí se reuniría, del partido cuando su padre, Jean Marie Le Pen, era líder, "a quien no hubiera visto nunca".
En esta línea también ha indicado que "no me vais a ver en ninguna foto con Otegi, ni dando una palmada amistosa a Pablo Iglesias, ni tomando café con Puigdmoent, y pocos políticos pueden decir eso".
VOX, ha resumido, está en "la afirmación de la importancia de los Estado-Nación y en la tradición judeo-cristiana frente al multiculturalismo, que es la puerta abierta al Islam en Europa". Abascal ha reconocido que aquellas reuniones con Marine Le Pen han servido para atacar a VOX al mismo tiempo que recordaba que "a VOX sistemáticamente se le ha estigmatizado".
Acabar con las autonomías
El líder de VOX ha mostrado su satisfacción por que personas dentro del partido, como Javier Ortega o Rocío Monasterio, vayan cogiendo relevancia y "VOX deje de ser un partido identificado con una persona".
La falta de medios, sobre todo económicos, ha llevado a VOX a ciertos "experimentos o gansadas" para conseguir notoriedad. En este sentido, ha dicho que "se puede salir desnudo en un cartel electoral (en referencia al primer cartel de Cs en Cataluña con Albert Rivera desnudo) y ser candidato respetable a la presidencia de España".
Abascal ha apostado por "una transformación radical de la autonomías" convirtiéndolo en "un estado unitario con un único gobierno, parlamento y TS, el TC sería una sala del TS". Como para eso se necesita una mayoría de dos tercios en el Congreso, Abascal ha dicho que "con una representación de varios escaños podemos empezar por pedir la recuperación de competencias como Educación, Justicia y Sanidad". Además de la de Interior para "aprobar la equiparación salarial". También ha prometido una reforma de la llamada ley de violencia de género. "Empezaríamos por cambiar el nombre a violencia doméstica porque la violencia no tiene género".