Carles Puigdemont se ha hecho con el control del PDeCAT. La coordinadora general de la formación heredera de Convergencia, Marta Pascal, ha tirado la toalla. No estará en la dirección del partido, tal como había exigido el fugado. El partido demócrata y europeo catalán, el PDeCAT, celebra este fin de semana su primera "asamblea nacional" y la última. El sector "crítico" ha ganado.
Finalmente triunfa la vieja guardia convergente encarnada por los exconsejeros presos Jordi Turull, Josep Rull y Quim Forn, el expresidente evadido, Carles Puigdemont, el exnúmero dos de Mas, Quico Homs y el exjefe de los municipios por la independencia y ahora consejero de Interior, Miquel Buch, entre otros.
Surgido hace dos años de las cenizas de Convergencia como una suerte de refundación del partido de Pujol, el PDeCAT se prepara para su disolución en el último invento de Carles Puigdemont, la Crida Nacional per la República (CNR) presentada el lunes pasado.
El expresidente de la Generalidad ha obtenido el control absoluto del PDeCAT. Ningún dirigente, ni Artur Mas ni Neus Munté, ha salido en defensa de Marta Pascal. Sólo contaba con un grupo de cuadros jóvenes y algunos militantes, poco para hacer frente a la determinación de Puigdemont.
Comisión de los presos
La propuesta de los críticos es que los exconsejeros presos constituyan una comisión para pilotar la integración en la Crida de un PDeCAT que contaría con un presidente (hay consenso en el nombre de David Bonvehí), una vicepresidenta (Miriam Noguera) y una dirección formada por veinte personas sin cargos orgánicos.
Marta Pascal ya había asumido la integración del PDeCAT en la CNR, pero intentaba que en esa dirección hubiera una secretaría general operativa que mantuviera vivo el partido. Estaba sentenciada desde que la semana pasada ordenara registrar el nombre de Junts per Catalunya para que no lo pudieran utilizar los partidarios de Puigdemont como marca para las próximas municipales.
República inmediata o cuando sea posible
Mientras prosigue la pugna, los delegados del partido celebran a puerta cerrada enconados debates programáticos sobre cómo y cuándo hacer "efectiva" la república proclamada por Puigdemont el 27 de octubre del año pasado. Los "críticos" han logrado que el domingo también se vote sobre el particular. Ellos proponen que sea "efectiva" "de inmediato". El grupo de Pascal considera mejor decir que "en cuanto sea posible".