Las vacaciones del exconsejero de la Generalidad Santi Vila están causando un encendido debate en el seno del separatismo. Vila ha publicado en su cuenta de Instagram una fotografía en la que aparece junto a su marido y cuatro amigos en bañador a bordo de una embarcación. Tal imagen de "dolce far niente" provocó la indignación del diario "El nacional", que dirige el exdirector de La Vanguardia José Antich.
El medio le dedicó un reprobatorio texto que ha tenido varios titulares a lo largo del día. El primero era "Las vacaciones de Santi Vila con jóvenes semidesnudos, y su gobierno en la cárcel". Más tarde cambiaron "semidesnudos" por "en bañador" y finalmente se ha impuesto el más aséptico "Las vacaciones de Santi Vila en la playa, y su gobierno en prisión".
En el texto aprovechan que Vila titula la foto de su Instagram "Las velas se hincharán", de una canción del musical catalán "Mar i cel", para afirmar que "lo único que sale inflado son los bíceps de los acompañantes y una parte de Santi Vila: su ego". La última versión de la noticia concluye de este modo: "Mientras sus compañeros de govern están en el exilio o en prisión, Santi Vila pasa así sus vacaciones".
"Jóvenes semidesnudos"
El primer texto con el titular de los "jóvenes semidesnudos" provocó la inmediata reacción del "Observatorio contra la Homofobia", que ha pedido a la Generalidad que se le abra un expediente al medio de Antich. El tono de la andanada contra Vila, que fue el consejero de Puigdemont que dimitió horas antes de la proclamación de independencia, no sólo ha soliviantado al citado organismo. Un colaborador de El Nacional y aspirante independentista a la alcaldía de Barcelona, Jordi Graupera, ha expresado en Twitter su malestar con el diario en el que colabora con el siguiente mensaje: "Qué manera más sucia de explotar la homofobia a cambio de clicks. Es el diario donde escribo y por tanto es mi deber decirlo".
El periódico ha acabado por pedir disculpas a través de Twitter: "Lamentamos el titular y el tono desafortunado de la noticia sobre las vacaciones del exconsejero Santi Vila. Trabajaremos para que no vuelva a pasar y pedimos disculpas a todo el que se haya sentido ofendido con razón".
Con nuevo dirigentes separatistas en la cárcel y varios más huidos de la justicia, las vacaciones de los políticos, así como las del juez Pablo Llarena, son objeto de un especial seguimiento de índole moral por parte de los medios y círculos separatistas. El sector más ortodoxo del nacionalismo ha decretado un luto amarillo que se expresa con las cruces en las playas.