Menú

El Supremo rechaza las recusaciones de los separatistas: no habrá tribunal a la carta

La Fiscalía advirtió un "fraude procesal y atentado a la buena fe" en el intento de los procesados de separar a los cincos magistrados de la Sala.

La Fiscalía advirtió un "fraude procesal y atentado a la buena fe" en el intento de los procesados de separar a los cincos magistrados de la Sala.
Fachada del Tribunal Supremo. | Cordon Press

Manuel Marchena, presidente de la Sala de lo Penal del Tribunal Supremo, y otros cuatro de sus miembros Andrés Martínez Arrieta, Juan Ramón Berdugo, Luciano Varela y Antonio del Moral juzgarán a los presuntos responsables del golpe en Cataluña. La denominada Sala del 61 del Alto Tribunal –por el artículo de la Ley Orgánica que la regula– ha acreditado la idoneidad de los cinco magistrados frente a los seis intentos de recusación presentados por once de los procesados, entre ellos el expresidente catalán Carles Puigdemont.

Rechazan por unanimidad todas las recusaciones. Es más, la Sala ni siquiera ha admitido a trámite los tres escritos presentados por quienes se encuentran en rebeldía: Puigdemont y sus exconsejeros Luis Puig y Clara Ponsatí.

Atentado a la buena fe

El Supremo notificará en los próximos días el auto íntegro con los argumentos, aunque con la resolución se suma a la línea de la Fiscalía, que describió un "fraude procesal y atentado a la buena fe". Afeó la conducta del separatismo porque pretende la constitución de un Tribunal a la carta. Respecto de Carles Puigdemont, en concreto, añadió que supone "un sarcasmo que accione la recusación quien está huido de la Justicia".

El Ministerio Público adelantó que "no concurre indicio alguno para sostener que han entrado en contacto con la instrucción del procedimiento, ya que ni han valorado ninguna de las decisiones acordadas por el Juez instructor, ni han examinado por vía de recurso las diligencias durante la instrucción". Por ello, "no es razonable sostener que las sospechas sobre la imparcialidad estén legítimamente justificadas", observando "cierto abuso de derecho".

También plantearon la recusación el exvicepresidente catalán y líder de ERC Oriol Junqueras; los exconsejeros Josep Rull, Jordi Turull y Raül Romeva; la expresidenta del Parlamento de Cataluña Carme Forcadell; y los que fueran líderes de la ANC y Òmnium Cultural Jordi Sànchez y Jordi Cuixart.

El Supremo acumuló en un único expediente los seis incidentes de recusación. Los procesados sostienen que cuatro de los cinco magistrados, todos menos del Moral, compusieron la Sala que admitió en octubre la querella por rebelión presentada por el entonces fiscal general del Estado José Manuel Maza. Por su parte, Junqueras y Romeva reclamaban también la recusación de este último porque comparte "ideología, valores y creencias".

La Sala del 61 está integrada por el presidente del Supremo Carlos Lesmes y los presidentes de cada una de las cinco Salas del Alto Tribunal, además del magistrado más antiguo y el más moderno de cada una de ellas. Aunque son habitualmente 16, han quedado en 13, puesto que ninguno de los tres jueces de la Sala de lo Penal ha asistido. Marchena y Martínez Arrieta por verse directamente afectados y Vicente Magro porque instruyó el expediente.

Entre sus atribuciones especiales, esta Sala del 61 resuelve incidentes de recusación contra los presidentes de Sala o dos o más magistrados de una de ellas y sobre la ilegalización de los partidos políticos, como Herri Batasuna.

Temas

En España

    0
    comentarios