El equipo jurídico de Ciudadanos estudia las acciones que emprenderá contra los medios de comunicación que han difundido, falsamente, que Albert Rivera evitó un control de drogas el pasado 7 de octubre. El líder naranja les ha indicado su intención de querellarse, algo que ya hizo en su día con el fundador de Podemos, Juan Carlos Monedero, quien finalmente se disculpó, tras haber afirmado en 2015 que Rivera consumía cocaína.
Varios periódicos digitales de ámbito catalán difundieron el bulo, así como el presentador estrella de la televisión autonómica catalana, Toni Soler, quien en el espacio que conduce, que se emite en prime time, se refirió jocosamente a ello. El exportavoz de Ciudadanos en el Parlament, Jordi Cañas, lo tildó de "basura" por ello.
Basura. Es basura. Basura. Si, eres basura. Rico y famoso a costa de los que humillas, pero simplemente basura. https://t.co/hoLleHf6Ca
— Jordi Cañas (@jordi_canyas) 23 de octubre de 2018
También el secretario de organización de Podemos, Pablo Echenique, se hizo eco en Twitter del bulo, aunque posteriormente lo rectificó.
Los hechos
Lo que realmente ocurrió, el pasado domingo siete de octubre, es que los dos escoltas oficiales de Rivera –dos policías nacionales asignados por Interior– indicaron a los responsables de seguridad del aeropuerto de El Prat en Barcelona que, bajo su responsabilidad, el dirigente naranja no tenía por qué someterse al control de explosivos que, de manera aleatoria, se realiza a determinados pasajeros. En ese momento Rivera, según fuentes presenciales, se había arremangado ya la camisa para someterse al control, cosa que finalmente no tuvo que hacer.
Posteriormente, uno de los agentes de seguridad del aeropuerto se dirigió hacia donde estaba Rivera con sus escoltas y les recriminó su actitud, llegando incluso a blasonar de haber trabajado en seguridad durante años en el País Vasco. Tras un intercambio de palabras la cosa no fue a más y el presidente de Ciudadanos, que volvía de asistir a la capilla ardiente de Monserrat Caballé, embarcó rumbo a Madrid. En El Prat, a diferencia de en el Adolfo Suárez Madrid Barajas, los diputados pueden acceder a la zona de autoridades, pero Rivera no utilizó ese privilegio.
Rivera, como otros dirigentes de Ciudadanos, el primer partido de la oposición en un momento de especial tensión en Cataluña a causa del proceso independentista, tiene protección cuando pisa esa comunidad autónoma. Allí, su tierra natal y en la que residía hasta hace tres años, viven sus padres y su hija pequeña. Según fuentes de su equipo, en todo momento Interior le ha solicitado que haga caso a las indicaciones de los escoltas, como así ocurrió en el incidente de marras.