Instituciones Penitenciarias, el organismo dependiente del Ministerio del Interior, ha ordenado en las últimas horas que se proceda al traslado de cuatro terroristas de ETA encarcelados y de otros dos miembros del GRAPO hasta centros penitenciarios más cercanos a sus domicilios familiares. Los cuatro etarras no irán ni al País Vasco ni a Navarra, pero serán desplazados desde prisiones en el sur de la Península a otras ubicadas en la mitad norte.
Los terroristas de ETA que se acercan a sus domicilios están condenados por delitos de integración en organización terrorista, intentos de asesinato, tenencia de explosivos o colaboración con banda armada. Todos, según las fuentes de Prisiones consultadas por EFE, habían renunciado por escrito a su vinculación con la organización terrorista de la que formaban parte -las dos están disueltas a día de hoy- y se habrían arrepentido de los crímenes cometidos.
El primero de los etarras acercados es Francisco Javier Chimeno, condenado a 30 años por intento de asesinato y tenencia de explosivos. Estaba cumpliendo condena en el centro penitenciario de Alicante II y ahora será trasladado a Burgos. Igór González Sala cumple condena de 20 años por los delitos de colaboración con banda armada, depósito de armas y falsificación de documento oficial. Hasta ahora estaba en Valdemoro y pasará a la prisión de Soria.
Mikel Orbegordo fue condenado a 12 años de prisión por pertenencia a banda terrorista, tenencia ilícita de armas, falsificación de documento público y resistencia a la autoridad. Ha cumplido ya tres cuartas partes de su condena e irá desde Badajoz a Valladolid. Jorge Fraile Iturralde fue condenado a 25 años colaboración con banda armada, tenencia de explosivos, estragos y daños y, tras haber cumplido tres cuartas partes de la pena, irá de Badajoz a El Dueso (Cantabria).
En lo que respecta a los terroristas del GRAPO (Grupos de Resistencia Antifascistas Primero de Octubre), uno de los acercados es el veterano Fernando Silva Sande, excabecilla de la organización, condenado por varios asesinatos y por el secuestro del empresario zaragozano Publio Cordón. Irá desde Soto del Real (Madrid) a Teixeiro (La Coruña). El otro, Jesús Merino del Viejo, irá de la prisión de Aranjuez (Madrid) al Centro de Inserción Social (CIS) Victoria Kent, en Madrid.