El próximo dos de diciembre, Podemos se la juega en Andalucía. En el partido de Pablo Iglesias verán ese día si se consuma la perdida de votos que pronostican las encuestas o si, en cambio, crecen sus apoyos. Dos escenarios que "perjudican" de una u otra forma al líder de Podemos, como explican fuentes de la formación.
Si crecen los apoyos...
La primera opción que afectaría de forma negativa a Iglesias se produciría si Adelante Andalucía (el nombre elegido por Teresa Rodríguez para su candidatura el 2 de diciembre) supera los 20 escaños que lograron entre Podemos e Izquierda Unida en las pasadas elecciones andaluzas del 22 de marzo de 2015.
Rodríguez se convertiría así en la primera líder autonómica del partido morado que refuerza su posición a pesar de haberse enfrentado abiertamente a Pablo Iglesias. Cabe recordar que desde Vistalegre I, la líder de Podemos Andalucía no ha escondido sus diferencias con Iglesias, que se agravaron cuando ella y su pareja, el alcalde de Cádiz José María González Kichi, se atrevieron a criticar la compra del chalé de Pablo Iglesias e Irene Montero por más de 600.000 euros.
"El código ético de Podemos no es una formalidad" sino "el compromiso de vivir como la gente corriente para poder representarla en las instituciones y supone renunciar a privilegios como el exceso de sueldo". "Ni lo he pensado ni quiero dejar de vivir y criar a mis hijos en un piso de currante en el barrio gaditano de La Viña", dijo en una carta Kichi.
Meses después, Rodríguez decidió construir su confluencia con IU Andalucía sin seguir las directrices de la cúpula morada que llegaban desde Madrid. Algo que enfado y mucho a la dirección de Podemos, y que acabó con la líder andaluza del partido acusando al secretario de Organización, Pablo Echenique, de crear un documento falso para destruirla.
Rodríguez terminó venciendo en esta batalla y Adelante Andalucía se convirtió en el nombre de su candidatura, como ella deseaba.
Si caen los apoyos...
En cambio, el escenario contrario tampoco favorecía al líder de Podemos. Si Teresa Rodríguez no llega a ese límite de los 20 escaños "se va a interpretar como una derrota de todo el partido, incluido de Pablo Iglesias", reconocen fuentes de la formación.
La cúpula morada lleva meses viendo como las encuestas pintan bastos para ellos. Desde la formación se ha asegurado que "las únicas encuestas que valen son las urnas" y el 2 de diciembre Podemos pasará por su primer examen.