El Gobierno ya no quiere que se aprueben los Presupuestos Generales del Estado y así lo han demostrado los socialistas en la votación que se ha producido esta mañana en la reunión de la Mesa del Congreso. Este órgano rector de la Cámara Baja se ha visto obligado a reunirse antes del inicio del Pleno a petición de Compromís. El grupo de Joan Baldoví solicitaba una votación por separado de las 6 enmiendas presentadas por PP, Ciudadanos, ERC, PDeCAt, Foro Asturias y Coalición Canaria.
Una votación por separado de estos textos hubiese podido cambiar el futuro de los presupuestos dado que si los miembros de PP y Ciudadanos no apoyaban las enmiendas a la totalidad de ERC y PDeCAT, o viceversa, no hubieran tenido votos suficientes para salir adelante.
Pero esta posibilidad ha sido rechazada por el PSOE. Los representantes socialistas en la Mesa, Micaela Navarro y Juan Luis Gordo, han sumado sus votos a los de PP y Ciudadanos para rechazar una votación por separado, lo que hará que las enmiendas se voten en bloque, según han informado a Libertad Digital fuentes parlamentarias.
Podemos, a favor
Los únicos que han votado a favor de que estas enmiendas se voten por separado, poniéndose del lado de Compromís, han sido los dos representantes de Podemos: Marcelo Expósito y Gloria Elizo.
Así la votación ha quedado 7 en contra y 2 a favor. Una prueba palmaria de que el Ejecutivo socialista ha tirado la toalla con la aprobación de sus cuentas públicas y piensa ya en el calendario electoral que diversas fuentes de PSOE y Gobierno sitúan en la fecha del 28 de abril.
Sin embargo, fuentes socialistas aseguran a este diario que el sentido de su voto responde a que "se siga haciendo como se ha hecho siempre hasta ahora" en el debate de totalidad de los Presupuestos.