Pablo Iglesias volverá al trabajo un mes antes de las próximas elecciones generales del 28 de abril. A finales de marzo, el líder del partido morado protagonizará "un gran acto en un espacio de referencia histórico de Podemos", tal y como confirman fuentes de la formación a Libertad Digital.
La dirección de Podemos, que no se encuentra en su mejor momento tras la crisis interna desatada por la marcha de Íñigo Errejón y las críticas de sus barones a la estrategia de la cúpula, pone ahora sus esperanzas en la vuelta de Iglesias. Esperan que la reaparición de su líder sea un revulsivo para sus bases y que dé un vuelco a la tendencia a la baja de Podemos que marcan las encuestas.
Creen, además, que Iglesias regresará a la primera línea política en un momento en el que los líderes de PP, Ciudadanos, PSOE y VOX ya estarán "más quemados" por estas semanas de precampaña. "Esperamos que el acto con el que vuelva Iglesias sea un gran catalizador de la energía militante que tendremos en esta campaña", explican fuentes del partido. "Creemos que su discurso será un marco de referencia para el Podemos que estamos construyendo", afirman desde su equipo, en el que se ya se preparan para su vuelta con un partido que pase, dicen, "de la infancia a la edad adulta".
Además del acto que preparan, Iglesias ya tiene apalabradas numerosas intervenciones televisivas y participará en todos los debates electorales a los que acudan los candidatos de otros partidos a la Presidencia de Gobierno. "Es en el diálogo y en el debate donde se ponen en evidencia las diferencias y se construyen alternativas efectivas a los problemas y necesidades que tiene la gente", creen desde el partido.
Los cálculos de Podemos
Todo ello, para intentar mantenerse. En Podemos saben que superar los votos de hace tres años es una meta imposible por lo que ponen sus esperanzas en volver a conseguir lo que ya tienen ahora.
En las elecciones generales del 26 de junio de 2016, Podemos logró poco más de cinco millones de votos. "Si Unidas Podemos consigue movilizar los votos que sacó en 2016 , ahora que hay cinco grandes partidos, estaría cerca de ser una de las fuerzas más votada en las elecciones del 28 de abril", afirman.
"No es un objetivo imposible porque ha sido así hace tan solo 3 años. Movilizando a todos los que fueron votantes hace 4 años, Unidas Podemos disputaría ser una de las fuerzas más votada en las elecciones", insisten. Unas cuentas que, según las encuestas, no se repetirían , ya que dan pérdidas de casi 10 puntos en intención de voto.