Pedro Sánchez sólo quiere un debate a su imagen y semejanza. Tras rechazar el cara a cara con el líder del PP, Pablo Casado, porque era una cuestión de "estrategia electoral", según defendió el jefe de campaña José Luis Ábalos, y aceptar el debate a cinco en Atresmedia con VOX porque se ajustaba a su estrategia de campaña de rebatir juntas a las tres formaciones de centro derecha, ahora acepta el debate a cuatro en TVE y pretende boicotear aquel al que se había comprometido inicialmente en el grupo Planeta.
Ante las presiones de los candidatos del PP y Ciudadanos, Pablo Casado y Albert Rivera, el Comité Electoral ha optado por la estrategia de intentar que decaiga el debate de Atresmedia a través de un cambio en las fechas del debate de RTVE que imposibilite la celebración del primero. La fecha inicialmente prevista para el debate en televisión española, el lunes 22 de abril, se pospone al martes 23 de abril, que es cuando estaba prevista la realización del debate de Atresmedia con la intención de suspenderlo.
Según han comunicado fuentes socialistas a Libertad Digital, Pedro Sanchez ya ha comunicado al grupo Planeta su "disponibilidad" a debatir "sólo en TVE el martes 23 de abril" descartando la posibilidad de acudir a dos formatos compatibles tal y como pretenden los líderes de PP y Cs.
Sin embargo, la supuesta falta de disponibilidad de Pedro Sánchez es incompatible con su agenda de campaña vacía para el lunes 22. No hay actos previstos a día de hoy ni territorio confirmación en la caravana socialista que pudiera excusar su asistencia. De hecho, desde la semana pasada que se cerró supuestamente su agenda de campaña, el lunes 22 y el martes 23 se dejaron en blanco, libres para la celebración y preparación previa del debate electoral. El único al que asistirá Sánchez en esta campaña en la que pasaron a la historia sus debates "con todos, sobre todo y sin cortapisas" de 2015.