En condiciones normales el resultado del Partido Popular en Galicía sería entre malo y muy malo. Por primera vez en décadas los populares gallegos no son el partido más votado en unas elecciones generales, pasando de 12 a 9 escaños en 2016 y de un 41,53% a un 27,67%. Pero ante el hundimiento del PP en el resto de España, mucho más acusado, el presidente de la Xunta y eterno aspirante a liderar el PP nacional, Alberto Núñez Feijoo, podría utilizar estos resultados como una baza para postularse a suceder a Pablo Casado.
El PSOE gana en Galicia con una subida de 10 puntos (del 22,21% al 32,18%) lo que se traduce en una subida de 6 a 10 escaños. Ciudadanos por su parte consigue por primera vez dos escaños en esta región y un 11,06%: mismos escaños que Podemos, aunque con un porcentaje de voto algo mayor, 14,45%.
Vox, que mantiene un discurso muy crítico contra Feijóo y el PP gallego, se queda muy lejos de obtener escaño con un resultado muy pobre, un 5,23%, quedando en sexta posición, incluso por detrás del BNG que también se queda sin escaño con un 5,76%.