Menú

El Gobierno inaugura una "nueva etapa": presión sobre PP y Cs para su abstención y premio de consolación a Podemos

La estrategia ha cambiado. Podemos seguirá siendo socio, pero no "preferente". El plan del Ejecutivo es "abrir el abanico" y ganar tiempo.

La estrategia ha cambiado. Podemos seguirá siendo socio, pero no "preferente". El plan del Ejecutivo es "abrir el abanico" y ganar tiempo.
Pedro Duque e Isabel Celaá | EFE

La negociación comenzará la semana que viene y el orden esconde el gesto que el Gobierno se guarda para consolar a Podemos tras la negativa de Pedro Sánchez a aceptar un gobierno de coalición con Pablo Iglesias. El líder de la formación morada será el primero en reunirse con el presidente del Gobierno en funciones y candidato a la investidura, Pedro Sánchez, en su ronda de contactos.

Iglesias y Sánchez se verán en el Congreso, previsiblemente por la mañana, y se reservará la tarde para las ‘derechas, los líderes de PP, Pablo Casado, y Ciudadanos, Albert Rivera. Un premio de consolación para el hasta ahora "socio preferente" que, al parecer ha dejado de serlo. Preguntada por la formación morada Celaá explico que "se abre ahora una nueva etapa".

La "nueva etapa" que quiere emprender el Ejecutivo de Pedro Sánchez es una interlocución con Podemos en calidad de socio pero en la que "habrá que abrir el abanico", según aseguró la portavoz gubernamental, Isabel Celaá, para hacer partícipes de la gobernabilidad a todas las fuerzas políticas mayoritarias para que el Ejecutivo no descanse su acción de gobierno sobre fuerzas separatistas. "Si efectivamente no queremos que el Gobierno de España dependa de fuerzas independentistas, el PP deberá hacer un ejercicio y Ciudadanos también".

Una táctica que comenzará la semana que viene con la prioridad de PP; Cs y Podemos en la negociación inicial que se abrirá posteriormente al resto de fuerzas políticas. La intención del Ejecutivo es proyectar y elevar la presión sobre Casado y Rivera para que se abstengan en la investidura de Pedro como hizo el PSOE en la investidura de Mariano Rajoy en 2016.

Por este motivo, Celaá informó de que la intención del presidente Pedro Sánchez es someterse a la investidura "cuanto antes" pero para ello pidió "responsabilidad" a las principales fuerzas políticas. Motivo por el que manifestó que "es muy importante que las fuerzas políticas sean conscientes de que en 28 días se ha votado cuatro veces y siempre con el mismo resultado, PSOE, por lo tanto el Gobierno ha de ser de un partido socialista sí o sí. Y esto dependerá la corresponsabilidad de las fuerzas políticas en su conjunto".

Preguntada por Podemos, dejó claro que "queremos que Podemos siga siendo socio porque lo que va a hacer el Gobierno son políticas progresistas" pero también abogó por contar con otras fuerzas políticas. O, dicho de otra forma: "Abramos el abanico porque nos gustaría que el resto de fuerzas políticas aportaran en positivo esa parte de la estabilidad que como representantes de la ciudadanía española les corresponde".

Y quiso, en este sentido, enfriar aún más la ya de por sí gélidas posibilidades de que Podemos entre en el gobierno: "Es facultad exclusiva del presidente. Entrará en el gobierno la persona que diga el presidente del gobierno. Él decide".

Como hiciera ayer el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en su comparecencia en Moncloa, la portavoz gubernamental también esquivó la posibilidad lograr la luz verde de la investidura gracias a la abstención de UPN, y evitó también vincular esa posibilidad a una repercusión en la alianza con el PNV, tanto a nivel nacional como municipal y local: "Con el PNV tenemos gobierno de coalición en Euskadi, por tanto, tenemos unas excelentes relaciones. Con Bildu no vamos a pactar nada", zanjó respecto a una posible alianza en Navarra.

Temas

En España

    0
    comentarios