El Gobierno intenta utilizar palabras grandilocuentes para disimular la enorme distancia que les separa en estos momentos de sus socios de ERC. Tanto que a veces esas palabras juegan una mala pasada. Es lo que le ocurrió este jueves a la portavoz del Ejecutivo en la comparecencia posterior a las dos reuniones mantenidas por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, con los portavoces de ERC, Gabriel Rufián, y el PNV, Aitor Esteban.
Montero se refirió en primer lugar a la reunión con ERC como una reunión "positiva" que le permitió albergar esperanzas y alegando que "estamos ante un momento inédito en el que no se puede comparar con ningún otro momento histórico". En este sentido dijo estar "convencida de que hay mucho que nos une pero, sobre todo, el amor por España".
Sobre las propuestas realizadas por los republicanos, Montero recogió el guante lanzado por Rufián para celebrar la mesa de diálogo para Cataluña y manifestó que "no tenemos ningún problema" en celebrarla el 15 de septiembre poniéndose a disposición de lo que diga el presidente catalán Quim Torra, a quien recordó: "Este Gobierno ha estado siempre dispuesto a celebrar la mesa" que estaba prevista para el mes de julio aunque dejó la pelota en el tejado de Torra: "No tenemos información de si el señor torra quiere reunirse. Preferimos esperar a que se produzcan acontecimientos".
Sin embargo, añadió que "se trata de temas diferentes" a los de unos Presupuestos Generales del Estado que calificó de "inéditos" y ante los que no cabe la actitud "excluyente" de plantear un veto a Ciudadanos por parte de ERC. "Yo hablaré con todos, me sentaré con todos, incluso los que se han auto excluido".
"Estos presupuestos serán progresistas pero no autoexcluyentes", dijo poniendo el ejemplo de un momento de emergencia "como un edificio en el que tiene lugar un incendio, en el que hay una emergencia nacional; todo el mundo a una, aparca las diferencias ideológicos y se pone a achicar agua, buscar a los desaparecidos... la prioridad es restablecer la normalidad. Acabamos de asistir a una emergencia que ha hecho que muchos ciudadanos hayan perdido la vida. Hemos tenido una tensión impresionante".