Pablo Iglesias mantiene su confianza en presentar "muy pronto" el borrador de los próximos Presupuestos Generales del Estado en un acto conjunto con Pedro Sánchez y en sacarlos finalmente adelante con la "mayoría de la investidura", o dicho de otra manera: con el apoyo de ERC y Bildu y sin el concurso de Ciudadanos, su auténtica bestia negra.
Así lo manifestaba este sábado el vicepresidente segundo del Gobierno durante su intervención ante el Consejo Ciudadano de Podemos, muchos de cuyos miembros se conectaban telemáticamente para escuchar al líder de la formación, flanqueado por sus números dos y tres orgánicos, Irene Montero y Alberto Rodríguez.
"Os adelanto que aunque seguramente a quienes forman un bloque de gobernabilidad con la extrema derecha no les va a gustar, los Presupuestos que vamos a presentar van a dejar ver nuestra influencia, van a dejar ver que en España hay un Gobierno progresista, en el que está Unidas Podemos" blasonaba Iglesias ante sus compañeros, aludiendo veladamente a los de Inés Arrimadas, quien hace unas semanas manifestó públicamente su intención de entrar en la negociación presupuestaria tras reunirse en la Moncloa con el presidente del Gobierno.
Iglesias no daba a partir de ahí más detalles concretos, aparte de generalidades como que serían unos presupuestos "ambiciosos" o que tendrían, eventualmente, "una inversión fuente, en la línea de sentido común, de sentido época que está marcando el acuerdo europeo" en referencia a los más de 700.000 millones de euros comprometidos este verano por el Consejo Europeo, que le valió a Sánchez un aplauso de su gabinete, con el propio Iglesias a la cabeza, a su vuelta de Bruselas.
"Avances en justicia fiscal"
Tampoco concretaba sobre las subidas de impuestos que pretende Podemos, y que rechaza Ciudadanos, aunque de nuevo tirando de palabras genéricas y ambiguas pronosticaba que las Cuentas Públicas tendrían "algunos avances importantes en materia de justicia fiscal"
Iglesias argumentaba que "ningún gobierno que se diga a sí mismo progresista se puede permitir, en un momento de transición económica como el que estamos viviendo, no tomar medias para corregir la desventaja de siete puntos en justicia fiscal que arrastra España con respecto a Europa y que nos sitúa en una posición de desventaja competitiva con respecto a alguno de los países de nuestro entorno" concluía.
Aludiendo a sus reuniones de esta misma semana con ERC y Bildu, Iglesias enfatizaba que estos grupos "están dispuestos" a negociar, al tiempo que se refería a ellos como "la única mayoría parlamentaria viable" tanto para los Presupuestos como para el futuro de la legislatura.