Las explicaciones que no recibieron los barones socialistas críticos con el pacto con Bildu se las ha dado este jueves el líder del PSOE y presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, a la militancia del partido socialista. A través de una carta a la militancia, el secretario general de la formación ha querido puentear a los barones que el pasado lunes le reclamaron información y comunicación previa de Sánchez para evitar malentendidos.
Sánchez nunca descolgó el teléfono y con este movimiento deja claro que no tiene intención alguna de hacerlo en el futuro. Un documento de cuatro folios con los que el líder socialista denota inquietud por la incomprensión que este asunto pudiera tener en su electorado tras la rebelión con tocata y fuga de los barones.
En el texto no aparece en ningún momento la palabra "Bildu" pero se refiere veladamente al pacto con los proetarras al señalar que "todos los apoyos son precisos" para aprobar los Presupuestos que España "necesita". Por ello, Sánchez argumenta que deben contar con un respaldo parlamentario que se extienda "cuanto sea posible y que no excluye a nadie".
Pero lo más relevante de la misiva es cuando se refiere, otra vez de forma velada, a las acusaciones de la oposición sobre el pacto con los proetarras a quienes acusa de ser "adversarios del Gobierno progresista" que "desvían la atención hacia polémicas artificiales y noticias inventadas".
Una obsesión por el control de la desinformación con la que se explaya el presidente. "Esta es precisamente una de las tres reglas que aplica el populismo reaccionario", que "crea fake news, noticias falsas que presenta como hechos para desacreditar a sus adversarios. Se sirve de estas falsedades para alimentar la polarización y la división social".
Y explica que "lo hemos visto hace muy poco en Estados Unidos y lo vemos desde hace meses en España. Se difunden primero acusaciones falsas y llamativas, fake news; se promueve, en segundo lugar, el odio y la polarización; y, en tercer lugar, se niega legitimidad a los resultados electorales, y se escamotean sus consecuencias, sea en el ámbito del Poder Judicial, en el Tribunal Constitucional o en cualesquiera de los demás órganos constitucionales".
El líder del PSOE concluye pidiendo "estar a la altura más allá del griterío partidista para construir la España que queremos sin dejar a nadie atrás". Lamenta que lo verdaderamente importante, los Presupuestos Generales del Estado, tendrán "poco espacio en el debate público" en donde "se desvía la atención hacia los asuntos del pasado".
Y cierra animando a la militancia: "Ésta es nuestra tarea, éste es nuestro momento y éste es nuestro proyecto", finaliza el secretario general del PSOE cuya número dos, la vicesecretaria general Adriana Lastra, proclamó el martes que "ahora nos toca a nosotros, somos una nueva generación a la que le toca dirigir el país y al Partido Socialista Obrero Español". Y punto en boca.