Aumenta el porcentaje de ciudadanos catalanes contrarios a la independencia y crece también la distancia entre partidarios y contrarios a la secesión. Un 48,7% de los ciudadanos votaría en contra de la independencia de Cataluña frente un 44,9% que lo haría a favor, según los datos del último barómetro del Centro de Estudios de Opinión (CEO) de la Generalidad, el CIS catalán. Desde julio de 2019 las encuestas del CEO registran una mayoría contraria a la independencia. El momento de mayor rechazo se produjo en julio de 2020, con un 50,5% en contra de la secesión, pero es ahora cuando hay mayor distancia, casi cuatro puntos entre los contrarios a la independencia y sus partidarios.
En cuanto a la forma política de Cataluña, el 34,2% cree que Cataluña debería ser un Estado independiente, el 28,1%, una comunidad autónoma de España, el 5,7%, una región española y el 25,6%, un Estado dentro de una España federal.
En cuanto al electorado de los partidos, destaca que sólo el 62% de los votantes de ERC cree que Cataluña debería ser un Estado independiente, si bien votarían por la independencia el 87% de ellos. El 85,4% de los votantes de Junts cree que Cataluña debería ser un Estado independiente y el 95,6% votaría a favor de la secesión. En el caso del electorado de la CUP, el 84,1% se inclina por la fórmula del Estado independiente y el 91,3% votaría a favor de la independencia.
Del mismo modo, el 84% de los electores del PP y el 82,6% de los de Cs opinan que Cataluña debe seguir como comunidad autónoma y todos votarían contra la independencia, igual que electorado de Vox. En el PSC se registra un 40,1% partidario de una organización federal de España y en los comunes, la versión catalana de Podemos, el apoyo a esa fórmula es del 56,9%. El 91,1% del electoral socialista votaría no a la independencia, porcentaje que desciende hasta el 66,2% en el caso de los comunes.
Victoria separatista
Respecto a la proyección electoral, ERC ganaría unas nuevas elecciones autonómicas con el 24% de los votos y entre 36 y 37 escaños. Ahora tiene 33 con el 21,30% de los votos. El PSC sería la segunda fuerza con 34-35 diputados y el 23,08% de los votos. Ahora tiene 33 diputados y el 23,03% de los votos. Junts se mantendría como tercera fuerza, pero con un notable retroceso. Pasaría de los 33 escaños actuales (23,03% del electorado) a 28 o 29 escaños con un apoyo del 18%. La CUP se convertiría en la cuarta fuerza, con 11 o 12 diputados y el 8,3% de los votos. Ahora tiene nueve escaños (6,68%). En Comú-Podem obtendría 8-9 diputados. Ahora tiene ocho. Vox pasaría de 11 a 7-8 diputados (6,2%) y el PP aumentará de tres a cuatro o seis, con un 6,4% del electorado. Ciudadanos, que ahora tiene seis diputados con un porcentaje del 5,58%, podría quedarse fuera del Parlament o sacar dos diputados con un porcentaje estimado de apoyo del 2,4%.