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Los golpistas indultados de JxCat atribuyen su libertad a la presión europea y a la labor de Puigdemont

Forn y Rull agradecen al expresidente prófugo que su situación "se haya podido resolver gracias a muchas decisiones que se han tomado en Europa".

Forn y Rull agradecen al expresidente prófugo que su situación "se haya podido resolver gracias a muchas decisiones que se han tomado en Europa".
El presidente de ERC, Oriol Junqueras, se dirige a los independentistas a las puertas del centro Penitenciario de Lledoners, tras salir de prisión. | EFE

Los condenados por el golpe de Estado separatista no tienen ni dudas ni reparos en atribuir su liberación a las decisiones judiciales europeas en torno a los prófugos Puigdemont, Lluís Puig y Toni Comín, cuyas extradiciones han sido denegadas en Alemania y Bélgica. Según los indultados esa, la presión europea, y no otra es la razón por la que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha decidido ponerlos en libertad.

En la ronda de entrevistas que están protagonizando tras su excarcelación, todos coinciden en señalar el factor europeo. Así, el que fuera consejero de Interior durante el golpe, Joaquim Forn, ha asegurado este sábado en una entrevista en el diario separatista Ara que su prioridad es ir a Waterloo para visitar al prófugo y agradecerle su activismo en Europa, un factor a su juicio fundamental para explicar su puesta en libertad.

De la mismo opinión es Josep Rull, otro exconsejero de JxCat, el partido de Puigdemont, quien ha asegurado en la radio del conde de Godó que el Gobierno ha concedido los indultos para evitar un "tirón de orejas a la justicia española" por parte del Consejo de Europa y del Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TDHE). Según la tesis de Rull, el Ejecutivo de Sánchez habría querido de esta manera proteger al Tribunal Supremo y al Tribunal Constitucional, que en su opinión "no son homologables a nivel europeo".

Rull y Forn han coincidido además en señalar que la estancia en prisión ha consolidado sus convicciones y han mostrado cierta preocupación por el hecho de que los indultos sean reversibles. No creen que hayan cometido ningún delito y siguiendo la retórica del "lo volveremos a hacer" apuntan a que su intención es persistir en la intentona secesionista.

Forn ha asegurado que para él fue un orgullo formar parte del gobierno que organizó el 1-O, aunque sólo estuvo tres meses y medio al frente de la consejería de Interior tras la renuncia de Jordi Jané, que decidió dimitir ante el sesgo que estaban tomando los acontecimientos en Cataluña.

Rull, por su parte, ha insistido en su vocación de participar en política, aunque ha descartado participar en la mesa de negociación entre Gobierno y Generalidad porque no cree que se vaya a llegar a ningún acuerdo.

En la misma línea que estos exreclusos se ha manifestado la también neoconvergente presidenta del parlamento catalán, Laura Borràs, quien sostiene que los indultos alivian a sus beneficiarios pero no resuelven el "conflicto político". Borràs ha cargado también contra Pedro Sánchez, pues en su opinión se hace el "valiente" con las medidas de gracia cuando, en su opinión, vienen impuestas por las resoluciones previas de tribunales belgas y alemanes. Borràs ha reiterado que es necesaria la amnistía y el cese de la supuesta represión del Estado contra el independentismo.

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