El segundo viaje de evacuación de Afganistán ha finalizado con éxito. Pocos minutos después de las 20.45 horas de este viernes, un avión B787-8 Dreamliner de Air Europa, que opera en los últimos días con código militar porque esta aerolínea tiene un contrato para transporte de tropas vigente con el Ministerio de Defensa, ha aterrizado en la base aérea de Torrejón de Ardoz, en Madrid.
El pasaje del mismo está compuesto por 110 afganos, de los que muchos de ellos son menores de edad. Se trata de algunos de los traductores locales y colaboradores que trabajaron durante casi veinte años con los militares españolas que estuvieron desplegadas tanto en Kabul como en las provincias de Herat y Badghis. Vienen acompañados por sus esposas y por sus hijos. Casi todas las familias numerosas para los estándares españoles.
La complicada operación se ha iniciado unos minutos después de las 3.00 horas, cuando un avión A400M del Ejército del Aire ha despegado desde la base de Al Minhad, en Dubai, con destino a Kabul. Allí ha aterrizado unas horas después, con todo el pasaje ya preparado porque habían sido alertados con antelación por la GEOS de la Policía Nacional que está allí. El avión ha regresado entonces hasta la base dubaití.
Casi sin tiempo para descansar, el pasaje de traductores afganos y sus familias han descendido del avión militar para subirse al avión de Air Europa que sirve a los intereses del Ministerio de Defensa. El objetivo era realizar el viaje hasta Madrid más rápido que si se hubiera realizado con otro A400M –con más lentos al tener motores turbohélice– y más cómodo –los aviones militares no están insonorizados–.
En total, los militares españoles han conseguido traer un pasaje de 165 personas en sus dos primeros trayectos. 55 en el primero y 110 en este segundo. El grueso de esa tripulación son traductores afganos y familiares –el número de españoles era muy pequeño, sobre todo teniendo en cuenta que el embajador y los GEOS no vendrán de Kabul hasta el último viaje– y se están quedando en el área de acogida organizada en la base de Torrejón.
Un área de acogida –con capacidad para 800 personas– que también va a ser empleado para dar alojamiento temporal a los traductores y familiares que han trabajado estos años para la Unión Europea. Todos los países enviarán los que consigan sacar de Afganistán hasta la base de Torrejón de Ardoz. Una vez allí se realizará el reparto de la acogida entre los 28 miembros de la Unión.
De este grupo ya hay 74 personas en las instalaciones madrileñas. Los 36 primeros llegaron ayer jueves en un avión procedente de Roma (Italia) fletado por el Servicio Europeo de Acción Exterior (SEAE). Esta misma tarde ha llegado a Torrejón un segundo avión con 38 personas a bordo procedente de París (Francia).