El Tribunal Supremo acumula ya 7 peticiones para revocar el indulto concedido por el Gobierno de Pedro Sánchez a los golpistas del 1-O. El pasado mes de junio, el Ejecutivo aprobaba esta medida de gracia en Consejo de Ministros con el informe contrario de la Fiscalía y de la Sala Penal del Supremo.
Fuentes jurídicas consultadas por Libertad Digital recuerdan que el plazo para recurrir los indultos "sigue abierto hasta que finalice este mes de septiembre, ya que agosto es inhábil". Hasta el momento, entre los recurrentes que han presentado su escrito ante la Sala Tercera del Supremo se encuentran PP, Vox, diputados de Ciudadanos y algunas asociaciones. No obstante, esta lista provisional de 7 podría aumentar en las próximas semanas.
Cuando se cierre el plazo, la Sala de lo Contencioso-Administrativo valorará si los recursos contra los indultos a los golpistas del 1-O se resuelven juntos o bien de forma sucesiva. También, se deberá decidir si la deliberación se asigna a una Sección de la citada Sala Tercera del Alto Tribunal o bien se avoca al Pleno.
Las mismas fuentes consultadas por LD señalan que los magistrados tienen como objetivo resolver los recursos "cuanto antes". Aunque es muy complicado fijar un horizonte temporal, se espera que haya una resolución antes del verano próximo. Aproximadamente, un año después de que Sánchez indultase a los 9 condenados por delitos de sedición o malversación por el referéndum ilegal del 1 de octubre de 2017.
Precisamente, los ataques de Sánchez y sus ministros a la justicia y al Supremo para justificar la concesión de la medida de gracia protagonizaba la apertura del año judicial que presidía este lunes el rey Felipe VI. El presidente en funciones del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) y del Supremo, Carlos Lesmes, durante su intervención afeaba las palabras de Sánchez y del resto del Ejecutivo: "Se ha llegado a contraponer, para explicar la indulgencia, la concordia frente al resentimiento, como si la acción de la Justicia al aplicar la ley a la que todos nos debemos fuese un obstáculo para la convivencia u obedeciera a razones distintas de las previstas en las normas. Nada más alejado de la realidad".
Además, Lesmes sostenía que "la función de los jueces y magistrados juzgando y haciendo ejecutar lo juzgado, con independencia absoluta de influencias externas o internas, políticas o de cualquier otra índole, no se corresponde en modo alguno con la idea de revancha o con el sentimiento de rencor, pues juzgar es dar a cada uno lo suyo de acuerdo con las leyes, leyes que han sido democráticamente aprobadas y que, por tanto, expresan la voluntad de la mayoría".
La "legitimación" de los recurrentes
Tal y como publicó este diario, una de las claves a la hora de resolver los recursos que se presenten contra los indultos será "la legitimación" de los recurrentes. A priori, Vox tiene más posibilidades de considerarse legitimado por haber ejercido la acusación popular en la causa sobre el 1-O, no obstante, eso no significa que se vaya a aceptar el recurso.
El Ejecutivo acordó el indulto a los golpistas del 1-O en Consejo de Ministros, después del informe contrario presentado por la Fiscalía y por el Tribunal Supremo. La Sala Penal del Supremo que preside el magistrado Manuel Marchena afirmaba que el indulto "es una solución inaceptable", que "la petición de indulto no activa una segunda instancia ante el Gobierno de la Nación" y recordaba además que "algunos de los que aspiran al beneficio del derecho de gracia son precisamente líderes políticos de los partidos que, hoy por hoy, garantizan la estabilidad del Gobierno llamado al ejercicio del derecho de gracia".