El nuevo ataque de Andrés López Obrador a España ha sido recibido con muestras de comprensión por la izquierda. Después de que el presidente mexicano anunciara una "pausa" en la relación bilateral entre México y nuestro país cuyo significado intenta dilucidar Exteriores, Unidas Podemos ha justificado sus palabras. Según su portavoz, Pablo Echenique, Obrador en realidad se refería a "algunas empresas" españolas.
En una entrevista en TVE, Echenique ha justificado al mandatario de izquierdas pidiendo "ir más allá de los titulares". Según el portavoz de Podemos, López Obrador quiere un sistema energético público en México, como Unidas Podemos aspira también en España, para que los ciudadanos paguen una factura de la luz mas baja y está "preocupado" por las actividades en el país de compañías como Repsol o Iberdrola, que no están "contentas" con esos planes.
"Con eso tiene un problema el presidente de México, no con España, que es evidentemente es un país aliado y hermano de México", ha remachado el portavoz del grupo confederal en el Congreso.
Mientras, la portavoz de Más Madrid en la Asamblea regional, Mónica García, ha vinculado el ataque de López Obrador con la visita que Ayuso hizo a Estados Unidos hace unos meses. En los pasillos de la Asamblea madrileña, García ha dejado caer que la presidenta madrileña sería la causa última del "tono" del presidente mexicano por su "escalada confrontativa" contra el indigenismo y contra el Papa Francisco, quien pidió perdón a México por los pecados de la Iglesia Católica.
"Dijimos que era la peor embajadora de Madrid, que estos caprichos confrontativos tenían consecuencias tanto políticas como económicas. Le pedimos que pare la confrontación con el resto de las CCAA, pueblos hermanos y actores políticos que a ella no le gustan", ha censurado.