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Los tres supervivientes del Villa de Pitanxo, "aún en shock" tras sobrevivir a la hipotermia en una balsa

El estado del mar dificulta el rescate de sus compañeros tras el naufragio en Terranova. Se han recuperado diez cadáveres.

El estado del mar dificulta el rescate de sus compañeros tras el naufragio en Terranova. Se han recuperado diez cadáveres.

Los tres supervivientes del Villa de Pitanxo, el barco gallego que naufragó en aguas de Terranova (Canadá), siguen el rescate de sus compañeros a bordo del barco gallego Playa de Menduiña Dos, el que localizó la balsa gracias a la que lograron sobrevivir al siniestro.

Los tres, "en proceso de descanso y aún en shock", están colaborando en las difíciles tareas de rescate del resto de marineros, "trasladando información" a las autoridades canadienses y a Salvamento Marítimo español.

Se trata del patrón, Juan Padín, su sobrino, Eduardo Rial, y un ciudadano ghanés, cuya identidad por ahora no ha trascendido. El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, ha destacado que tienen que ser personas "muy fuertes" porque es "muy difícil permanecer con vida" aguantando en una balsa ante las bajas temperaturas de la zona y y el "riesgo de hipotermia"

Tras una reunión en la Autoridad Portuaria de Marín (Pontevedra), villa pesquera en la que tenía su base el buque, Núñez Feijóo se ha referido también a las causas del naufragio recordando que el buque tenía 50 metros de eslora. Ha señalado que "un gran barco", de manera que las condiciones del mar tenían que ser "absolutamente adversas". "Estamos hablando de gente que sabía navegar, que son profesionales de la navegación, que son buenos patrones y excelentes marineros. Por tanto tuvo que ser una situación de mar muy complicada", ha destacado.

El Villa de Pitanxo, un arrastrero congelador construido en 2004 en el desaparecido astillero vigués M. Cíes bajo encargo del armador Manuel Nores y dedicado a la captura de fletán negro, llevaba 24 tripulantes a bordo, de los que diez han fallecido, tres han sido rescatados con vida y 11 continúan desaparecidos. De las 24 personas que trabajaban en el pesquero en el momento del hundimiento, 16 tienen nacionalidad española, cinco son peruanos y tres ghaneses.

El delegado del Gobierno en Galicia ha indicado este miércoles que el proceso de repatriación será "difícil y complicado" porque el accidente se produjo a 450 kilómetros de la costa de Terranova a unos 3.000 kilómetros de Galicia.

Difícil rescate

Las condiciones del rescate son muy adversas, con viento de 50 kilómetros por hora; mar arbolada y con olas de 6 y 7 metros, y mala visibilidad.

En el operativo, participan los buques canadienses Cygnus y Nexus y los pesqueros Rio Caxil (español) y Franca da Morte (portugués). A ellos se unirán se unirán los pesqueros portugueses Lutador, Pascoal Atlántico y Novo Virgem da Barca, así como el español Playa Menduiña 2. También está movilizado un avión canadiense.

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