El titular del Juzgado de Instrucción nº 15 de Valencia, Vicente Ríos, mantiene abierta una pieza secreta en la causa que afecta a la ya exvicepresidenta y exconsejera valenciana Mónica Oltra. La dirigente de Compromís es investigada por varios delitos derivados del presunto encubrimiento de los abusos sexuales que cometió su entonces marido, Luis Ramírez Icardi, a una menor tutelada de 14 años.
Fuentes de la causa consultadas por Libertad Digital afirman que "el instructor ordenó este lunes a la Policía Judicial registrar la Consejería de Igualdad". Concretamente, la que ocupa la Dirección Territorial de Valencia, para que se intervinieran todos los expedientes relativos a la menor que sufrió abusos.
Dicha diligencia fue acordada después de que la asociación GOBIERNA-TE, cuya querella originó la causa, presentara un escrito solicitando la práctica de una serie de diligencias. Los agentes registraron las dependencias durante más de ocho horas recabando toda la información solicitada por el juzgado. Principalmente, la documentación original referida a la menor y las comunicaciones telemáticas contenidas en los servidores de la Administración en todo el año 2017.
El juez Vicente Ríos ha recuperado la causa tras renunciar Oltra a su escaño en el Parlamento valenciano y por tanto, su aforamiento ante el Tribunal Superior de Justicia de Valencia TSJV.
El instructor pidió el pasado mes de abril a la Sala de lo Civil y Penal del TSJV la imputación de la entonces vicepresidenta y consejera de Igualdad por este caso, en el que figuran como investigados 13 altos cargos del departamento, al considerar que había indicios "racionales, serios y fundados" de la participación de Oltra en los hechos investigados.
La dimisión de Oltra
Mónica Oltra anunciaba este martes su dimisión como vicepresidenta del Gobierno autonómico y diputada de las Cortes valencianas después de que el TSJV la imputase por encubrir los abusos de su marido a una menor. Aseguraba que se marcha "con la cara bien alta" y con "los dientes muy apretados" para "no comprometer el proyecto de cambio iniciado en 2015".
"Me cuesta esta decisión sobre todo porque ganan los malos", aseveraba entre lágrimas, mientras apuntaba que su dimisión está provocada por "una de las mayores infamias" en este país y pedía perdón a la gente vulnerable, a la que se ha dedicado y a la que "le duele en el alma" dejar.