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El juez José Ricardo de Prada suena como candidato del Gobierno a magistrado del Tribunal Constitucional

Fuentes jurídicas consultadas por LD aseguran que "De Prada sería una exigencia de Podemos para apoyar su reforma exprés para renovar el TC".

Fuentes jurídicas consultadas por LD aseguran que "De Prada sería una exigencia de Podemos para apoyar su reforma exprés para renovar el TC".
El juez José Ricardo de Prada. | EFE

El juez José Ricardo de Prada se postula como candidato del Gobierno de Pedro Sánchez a magistrado del Tribunal Constitucional. Actualmente, De Prada integra la Sección Primera de la Sala Penal de la Audiencia Nacional, que se encarga de ratificar o revocar las decisiones de Vigilancia Penitenciaria. Entre ellos, los beneficios penitenciarios concedidos a los presos de ETA.

El PSOE registraba este viernes en el Congreso una proposición de Ley urgente para que el CGPJ en funciones pueda únicamente proponer a los dos magistrados que le corresponde para renovar el Tribunal Constitucional. El texto es una modificación del artículo 570 bis de la Ley Orgánica 6/1985 del Poder Judicial que entraría en vigor en julio y sirve de parche para la reforma que el propio Ejecutivo aprobó el año pasado para prohibir al CGPJ realizar nombramientos en funciones y forzar así su renovación.

Fuentes jurídicas consultadas por Libertad Digital aseguran que "la elección del juez José Ricardo de Prada como magistrado del Tribunal Constitucional sería una exigencia de Podemos para apoyar su reforma exprés para renovar el Alto Tribunal. Necesitan el apoyo de la formación morada en el Congreso para sacar adelante el proyecto de Ley de reforma que permite al CGPJ en funciones nombrar a los dos magistrados del TC que le corresponden en esta renovación".

Las mismas fuentes jurídicas consultadas por LD aseguran que si "De Prada es elegido como uno de los magistrados del TC que debe designar el Gobierno, se evitarían tener que negociar con el Partido Popular en otros posibles destinos para este juez como vocal del CGPJ". Recordamos que el año pasado la renovación del CGPJ entre PSOE y PP se paralizó cuando los socialistas propusieron como vocales a De Prada y a Victoria Rosell.

"Si finalmente De Prada es uno de los dos magistrados elegidos por el Gobierno, se configurará un sector progresista ‘temible’ en el Constitucional junto a los magistrados Cándido Conde-Pumpido, Ramón Sáez-Valcárcel o María Luisa Balaguer", añaden. Precisamente, el magistrado Sáez-Valcárcel fue elegido magistrado del TC el pasado mes de diciembre a propuesta de Podemos.

El pasado 12 de junio expiró el mandato de cuatro magistrados del Alto Tribunal: el actual presidente del Constitucional, Pedro González-Trevijano (conservador) y los magistrados Antonio Narváez (conservador), Santiago Martínez-Vares (conservador) y Juan Antonio Xiol (progresista). En esta renovación, corresponde al Ejecutivo proponer a dos magistrados y al CGPJ otros dos.

La renovación en el TC propiciará el cambio de mayorías en el Alto Tribunal. Se pasaría de 7 magistrados conservadores y 5 magistrados progresistas a lo contrario, 5 conservadores y 7 progresistas, ya que el Gobierno elegiría a los dos que le corresponden y a uno de los dos del CGPJ . En este contexto, el magistrado progresista Cándido Conde-Pumpido sería elegido nuevo presidente en sustitución del conservador Pedro González-Trevijano.

El juez que tumbó a Rajoy

José Ricardo de Prada (Madrid, 1957) aterrizó en la Audiencia Nacional en 1990 y es magistrado de la Sala Penal. Hasta ahora, desarrollaba sus funciones en la Sección Segunda. Fue el artífice de la moción de censura que consiguió derrocar al Gobierno de Mariano Rajoy y llevar a Pedro Sánchez a la Moncloa. De Prada tumbó al Ejecutivo del PP con la sentencia sobre la primera época del caso Gürtel en la que cuestionó la "credibilidad" del propio Rajoy y en la que los populares fueron condenados a pagar 245.000 euros de multa como partícipes a título lucrativo de la trama corrupta.

Especialmente polémicas han sido sus decisiones judiciales relacionadas con el terrorismo de ETA o de los CDR en Cataluña. Además, fue uno de los magistrados que apoyó públicamente a Baltasar Garzón cuando fue juzgado en el caso de las escuchas ilegales en Gürtel por el que fue finalmente inhabilitado como juez.

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