El Gobierno ha conseguido superar el último trámite en la Comisión Constitucional del Congreso antes de votar la próxima semana la Ley de Memoria Democrática. Han contado con el voto a favor de PSOE, Podemos, PDeCAT, PNV y los proetarras de Bildu. Los separatistas de ERC se han abstenido tras colar varias transaccionales. En contra han votado PP, Cs, Vox y UPN en representación del grupo mixto.
Pero sin duda quienes más están celebrando que se reescriba la historia de España a su antojo son los herederos de la banda terrorista ETA, que ya señalan que van a "sacudir el relato de la Transición ejemplar", tal y como ha asegurado la portavoz proetarra Mertxe Aizpurua en una entrevista.
En ella también ha dicho que han acordado ilegalizar los tribunales que se hicieron en la dictadura y anular las sanciones impuestas; y la ampliación de la Ley de la Memoria del 78 al 1983. De esta forma se abre la posibilidad de "revisar" las violaciones a los derechos humanos ocurridas hasta 1983.
Hace unos días, la propia portavoz proetarra dijo que la nueva Ley de Memoria Democrática servirá para "recuperar la memoria" de los miembros de ETA José Antonio Lasa y José Ignacio Zabala, "torturados" en el palacio de La Cumbre –cedido ahora al Ayuntamiento de San Sebastián– antes de ser asesinados y enterrados en cal viva en Alicante en 1983.
También anunció que se abordará el inicio de los GAL al pactar con el Gobierno esa ampliación de su aplicación temporal de 1978 a finales de 1983, año de inicio de la actuación de esta organización dedicada a la guerra sucia contra ETA y cuyo "señor X" se apunta que fue el entonces presidente del Gobierno, Felipe González.
A González no le "suena bien"
El expresidente González ha reconocido que el extremo de que el pacto del Gobierno con los proetarras para que en la nueva Ley de Memoria se reconozca a las víctimas de violaciones de Derechos Humanos hasta 1983 no le "suena bien".
Felipe González ha señalado en declaraciones a los medios desde Santander, donde participa en un encuentro de la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP), que no ha visto el texto: "Cuando lo vea les diré, pero sonarme, no me suena bien".