Junts per Catalunya (JxCat) da un paso más en sus amenazas y su presión a ERC. En la apertura de la segunda parte del congreso del partido que se celebra este sábado el indultado Jordi Turull se ha reído de ERC por confiar en Pedro Sánchez y hacer de "socorristas" del presidente del Gobierno para que pueda concluir la legislatura.
Esta tarde han dado un paso más. Por un lado, el coordinador de la ponencia política en el congreso de Junts, Aleix Sarri certifica que dan por acabada la mesa de diálogo con el Gobierno de Pedro Sánchez, mesa en la que los de JxCat nunca han participado.
Sarri ha asegurado que hay consenso en este punto porque consideran que es "perjudicial" dentro de Cataluña y a nivel internacional, y porque creen que no ha dado frutos ni resultados suficientemente tangibles, en sus palabras.
Pactos municipales y supramunicipales
También ha explicado que analizarán, de cara las elecciones municipales de 2023, si deben romper el pacto con el PSC en la Diputación de Barcelona. "Cualquier decisión se tomará caso por caso, habiendo escuchado a los representantes de Junts de cada territorio y teniendo en cuenta el balance de las acciones concretas del Govern", ha respondido cuando se le ha preguntado por la posibilidad de romper el pacto con el PSC.
"Mientras haya exiliados y represaliados, Junts pactará de forma muy prioritaria con partidos que acepten el derecho a la autodeterminación y condenen la represión", se recoge en el documento aprobado en relación a los pactos supramunicipales —diputaciones y consejos comarcales—.
Este mismo redactado también se ha incluido en la ponencia municipal, que ha coordinado Jordi Fàbrega, que en rueda de prensa ha explicado que el texto acordado supone "un punto de partida de aquí en adelante". "Este redactado nos marca una hoja de ruta a seguir a partir de ahora, y mirando a las municipales de junio, este pacto —el de la Diputación de Barcelona— sería muy complicado de aquí a 2023 si no cambian mucho las cosas", ha precisado.
Ruptura del 'Govern'
Pero es el anuncio de que consultarán con la militancia si el partido debe seguir formando parte o no del Govern lo que tiene más trascendencia de cara al futuro y lo que, sin duda, meterá más presión a ERC.
Junts sostiene que tienen un "manual propio" para hacer posible la independencia, y que están en el Govern para avanzar en este objetivo. Por ello van a hacer un balance del grado de cumplimiento del acuerdo de gobierno con ERC. Pero si algo tiene claro Junts es que su política ante el Ejecutivo central y su estabilidad "no es un objetivo" de la formación, como forma de diferenciarse de ERC, y que cualquier cambio de posición deberá ser avalada por la militancia.
"La ponencia permite replantear el acuerdo de gobierno si no se avanza en esta línea y ponerlo potencialmente a consulta de la militancia", ha explicado Sarri, que también ha añadido que el quinto aniversario del 1-O este año debe suponer un punto de inflexión en la voluntad de culminar la independencia.