
El acercamiento de terroristas de ETA a prisiones del País Vasco y Navarra no se frena. Si en el mes de junio, coincidiendo con la celebración de la cumbre de la OTAN en Madrid, y durante las primeras semanas de julio se pararon los movimientos, la realidad es que tras reanudarse los mismos hace quince días el Ministerio del Interior ha pisado el acelerador en las últimas horas con un traslado masivo de presos etarras.
La Dirección General de Víctimas del Terrorismo, órgano dependiente del departamento que dirige Fernando Grande Marlaska, ha informado este martes a las principales asociaciones de víctimas que hasta doce terroristas de ETA van a ser trasladados a prisiones del País Vasco y Navarra en los próximos días. Uno de los movimientos más numerosos llevados a cabo por el Ejecutivo de Pedro Sánchez desde que llegasen al Gobierno.
La Asociación Víctimas del Terrorismo ha censurado estos movimientos y ha asegurado que las víctimas de ETA están "hartas de ver cómo estos asesinos que quisieron romper nuestro país y que dejaron gran cantidad de familias rotas, ahora son trasladados a cárceles del País Vasco, algo que desde la AVT llevamos tiempo denunciando y que no es otra cosa que la antesala de terceros grados y puesta en libertad de estos terroristas".
"A este ritmo, quizás antes de que finalice el 2022, el Gobierno de Pedro Sánchez podrá presumir ya no de haber trasladado a todos los presos de ETA, sino de haber acercado a todos y cada uno de ellos al País Vasco y Navarra. Todo esto, sin importarle lo más mínimo el sufrimiento de las víctimas del terrorismo, unas víctimas, a las que nuestras psicólogas han tenido que comunicar esta mañana que el asesino de uno de sus seres queridos va a ser premiado con el traslado a una prisión vasca y que seguramente, dentro de unos meses se lo puedan encontrar en la calle disfrutando de su tercer grado", añaden desde la asociación.
Los 12 terroristas de ETA que van a ser traslados suman en su historial criminal 15 asesinatos y son Itziar Alberdi Uranga, Mikel Xabier Ayensa Laborda, Juan Carlos Besance Zugasti, Zigor Bravo Saez de Urabain, Aitor García Aliaga, Iurgi Garitagoitia Salegui, Juan Jesús Narváez Goñi, Alicia Lucía Sáez de la Cuesta Martínez de San Vicente, Ángel María Tellería Uriarte, Íñigo Vallejo Franco y Mánex Zubiaga Bravo.
Itziar Alberdi Uranga. Del Centro Penitenciario de Logroño al Centro Penitenciario de Álava. En 2015 fue condenada a 296 años de prisión por el asesinato de Andrés Muñoz Pérez y Valentín Martín Sánchez.
Mikel Xabier Ayensa Laborda. Del Centro Penitenciario de Logroño a una prisión del País Vasco. En 2003 fue condenado a 30 años de prisión como responsable del atentado que le costó la vida a Tomás Caballero Pastor. También fue condenado a 30 años de prisión como autor del asesinato de Francisco Casanova Vicente.
Juan Carlos Besance Zugasti. Del Centro Penitenciario de Dueñas (Palencia) al Centro Penitenciario de Álava. Fue condenado a 58 años de prisión por el asesinato de José Javier Múgica, concejal de UPN en Leitza (Navarra). También fue condenado a 19 años de prisión por intentar asesinar de un tiro al ex consejero socialista de Justicia y Educación del Gobierno Vasco, José Ramón Recalde en el año 2000.
Zigor Bravo Saez de Urabain. Del Centro Penitenciario de Soria al Centro Penitenciario de Álava. Fue condenado a 28 años de prisión por colaboración en el asesinato de Máximo Casado Carrera, además de por daños terroristas.
Aitor García Aliaga. Del Centro Penitenciario de Burgos al Centro Penitenciario de Álava. Fue condenado en 2006 a 323 años de cárcel como autor del asesinato de Justo Oreja Pedraza. En 2004, fue condenado a 83 años por su participación en el atentado que acabó con la vida de Luis Ortiz De la Rosa. Además, cumple condena por los delitos de pertenencia a banda armada, colaboración con banda armada, estragos, lesiones y tenencia de armas.
Iurgi Garitagoitia Salegui. Del Centro Penitenciario de Logroño a una prisión del País Vasco. En marzo de 2021 fue condenado a 44 años de prisión por el asesinato del empresario Ignacio Uría. Además, fue condenado en 2020 como autor de 25 delitos de asesinato terrorista en grado de tentativa, delito de daños terroristas y tenencia de explosivos a 389 años de cárcel por colocar el 15 de enero de 2009 un artefacto explosivo en un repetidor de telefonía y televisión en el cerro de Santa Bárbara de Hernani y dos bombas trampa para alcanzar a los ertzaintzas que acudiesen tras la primera explosión.
Juan Jesús Narváez Goñi. Del Centro Penitenciario de Logroño a una prisión del País Vasco. En 2015 fue condenado a 296 años de prisión por el asesinato de Andrés Muñoz Pérez y Valentín Martín Sánchez. También acumula una condena de 60 años por el asesinato de Francisco Javier Delgado González-Navarro y José Ángel Garrido Martínez.
Alicia Lucía Sáez de la Cuesta Martínez de San Vicente. Será trasladada del Centro Penitenciario de Logroño al Centro Penitenciario de Álava. En 2002 fue condenada a 29 años de prisión como autora del asesinado del Suboficial de la Guardia Civil, Alfonso Parada Ulloa.
Ángel María Tellería Uriarte. Del Centro Penitenciario de El Dueso, en Cantabria al Centro Penitenciario de Álava. Fue condenado en 2018 a 26 años por su participación en 1981 en el atentado que le costó la vida a María José García Sánchez. También fue condenado a 6 años por integración en banda armada y otros 10 años por depósito de armas.
Diego Ugarte López de Arcaute. Del Centro Penitenciario de Mansilla de las Mulas, en León al Centro Penitenciario de Álava. Cumple una condena de 30 años por homicidio, atentado, asociación ilícita, tenencia de explosivos, depósito de armas y municiones, y falsificación de documento público. En 2005 fue condenado a 100 años y 9 meses de prisión por el asesinato del portavoz del PSOE en el Parlamento vasco Fernando Buesa y su escolta, Jorge Díez, cometido el 22 de febrero de 2000. Cumplirá las 3/4 partes de la condena diciembre de 2027.
Íñigo Vallejo Franco. Del Centro Penitenciario de El Dueso (Cantabria) a una prisión del País Vasco. En el año 2000 fue condenado a 17 años de cárcel por delitos de terrorismo y lesiones cometidos por terrorismo callejero. Y en 2002 condenado a 13 años de cárcel por haber dispuesto los explosivos para llevar a cabo una "campaña de atentados" en Sevilla con motivo del Consejo Europeo que se celebró el 21 y el 22 de junio de 2002.
Mánex Zubiaga Bravo. Del Centro Penitenciario de Burgos a una prisión del País Vasco. En noviembre de 2010 la Sección Segunda de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional le condenó a 111 años de cárcel por su participación en el atentado perpetrado por ETA el 12 de octubre de 2001 en Madrid, en el que resultaron heridas una veintena de personas después de que un coche-bomba hiciera explosión en el parking de la Plaza de Colón a las doce de la noche. En septiembre de 2008 Zubiaga fue condenado por la Audiencia Nacional a más de 1.500 años de prisión por el atentado con coche bomba perpetrado contra el director general de la Policía Científica, Juan Junquera González, en la calle Corazón de María en septiembre 2001 y en el que resultaron heridas 94 personas.