Los cazas del Ejército del Aire vuelven a desplegarse de nuevo en el Báltico. Y lo hacen solo un mes después del regreso del destacamento que ha estado desplegado en Lituania. Cuatro cazas Eurofighter Typhoon, pertenecientes al Ala 14, con sede en la base de Los Llanos (Albacete), han llegado en las últimas horas a Ämari, localidad situada al noroeste de Estonia, donde van a quedar desplegados para proteger el espacio aéreo aliado.
El espacio aéreo de los países bálticos es crítico para la OTAN. Más aún después de la invasión rusa de Ucrania, que pone de manifiesto la poca disposición de Rusia de convivir de forma pacífica con sus vecinos que un día formaron parte de la URSS y sus áreas satélites. Y va a ser una misión muy diferente a las que se han venido realizando hasta ahora, porque se va a trabajar de forma conjunta con militares de Alemania, creando un único destacamento.
No sólo se va a compartir los vuelos, algo que es habitual en misiones y ejercicios conjuntos que realizan los países de la Alianza Atlántica, sino que equipos conjuntos hispano-alemanes se van a encargar de mantener, preparar y recuperar los cazas de combate después de cada vuelo, lo que va a ser el auténtico reto. Obviamente, para ello, los alemanes se despliegan también en Estonia con cazas Eurofighter Typhoon.
Este reto va a ser de tan sólo tres semanas, mucho menos de los tres meses que duran las rotaciones habituales. Es por ello que el destacamento español va a ser esta vez mucho más pequeño de lo habitual. Si hasta ahora el despliegue en estas misiones de Policía Aérea de la OTAN venía siendo de unos 130-140 efectivos, esta vez sería de unos 65 militares, entre pilotos, armeros, mecánicos y otros miembros de apoyo al despliegue aéreo.
El objetivo de esta misión es proteger el espacio aéreo de estas tres pequeñas repúblicas bálticas, que no tienen medios suficientes para garantizarla por ellos mismos. En el momento de su integración en la OTAN, en 2004, llegaron a un acuerdo con el organismo supranacional para que fueran otros socios de la coalición, con capacidad para ello y con carácter rotativo, quienes les garantizasen esa protección aérea.
La principal amenaza van a ser los aviones militares de la Fuerza Aeroespacial rusa, que violan de manera continuada el espacio aéreo de estos países cuando vuelan entre Rusia y su exclave de Kaliningrado, además de volar fuera de este espacio aéreo incumpliendo por norma las leyes internacionales de aviación, es decir, sin plan de vuelo conocido y con el transpondedor apagado.