Los cazas de combate del Ejército del Aire y el Espacio siguen desplegándose en el Este de Europa para dar apoyo a los países aliados ante la constante amenaza rusa para su espacio aéreo. El último movimiento español ha sido el despliegue de un contingente de ocho cazas de combate F-18 Hornet, que van acompañados por un total de 130 efectivos militares españoles entre pilotos, armeros, mecánicos, personal sanitario y de apoyo logístico o económico.
Durante cuatro meses, entre este jueves 1 de diciembre y el próximo viernes 31 de marzo de 2023, van a estar desplegados en la base aérea de Fetesi, en el noreste de Rumanía, muy próximo a las fronteras con Moldavia y Rumania, con el objetivo de ayudar a los rumanos a controlar su espacio aéreo, en misión de Policía Aérea, a la vez que fortalecen el escudo aéreo anti-Rusia de la OTAN en esta zona del continente.
El gran objetivo que tendrán los cazas F-18 españoles, que ya se encuentran en suelo rumano desde hace unas horas, será tratar de disuadir e identificar a las aeronaves militares rusas que de forma habitual violan el espacio aéreo rumano y sus áreas de responsabilidad, algo que siempre hacen saltándose la legalidad aérea internacional, ya que vuelan con el transpondedor apagado y sin plan de vuelo notificado.
Allí, además, van a coincidir con otro destacamento español que llegó al país a medidos de octubre y que, al igual que ellos, va a estar desplegado también hasta el 31 de marzo -aunque esta misión es prorrogable hasta el 20 de junio de 2023- y que consiste en el despliegue de un radar de vigilancia aérea de largo alcance, ubicado en el acuartelamiento de Schitu, en plena costa del Mar Negro, para ayudar a controlar el espacio aéreo en el flanco este de la OTAN.
Estos destacamentos no van a estar solos en esta zona de Europa, pues hasta el próximo viernes 2 de diciembre, van a coincidir con el componente español que se encuentra desplegado desde mediados de noviembre en la base aérea de Bezmer, ubicada en el centro-este de Bulgaria, donde están un total de 6 cazas Eurofighter Typhoon y 150 militares entre pilotos, mecánicos, armeros, personal médico y de apoyo logístico o económico.