El Partido Popular espera comenzar el año 2023 con una mejora en la encuestas. Tras unos meses en los que los de Alberto Núñez Feijóo se han estancado en los sondeos, las predicciones internas que realizan en Génova auguran un buen mes de enero. Los últimos escándalos protagonizados por Pedro Sánchez con su asalto a la Justicia copando todos los titulares, la derogación de la sedición, la reducción de penas de la malversación, además de las reducciones de penas de delincuentes sexuales consideran en el PP que se "reflejarán" en las encuestas de principios de año.
El PP explica además que en esos sondeos se traducirá también su última "victoria" jurídica: su recurso ante el Constitucional que logró frenar las dos enmiendas con las que el PSOE quería controlar el TC y el CGPJ.
Recuperación de Vox
A todo ello, se suma que los populares también están viendo como la formación de Santiago Abascal sube hasta dos puntos en los sondeos, algo que vuelve a situar a la derecha dentro de la horquilla de escaños que puede superar la mayoría absoluta si se celebrasen elecciones.
Fuentes de Génova reconocen abiertamente que el partido de Abascal "ha recuperado los niveles previos a las elecciones andaluzas" del pasado mes de junio. "Vox tiene su suelo de votantes fieles, muchos de ellos están volviendo tras las andaluzas, y el PP ahí no pierde electorado. Lo malo es cuando perdemos voto moderado o que no sumáramos", explican desde el PP.
Además, los populares han dejado de ver la moción de censura como una "amenaza" y han aceptado que, en enero cuando la presenten, cada partido tendrá su papel. Los contactos entre Feijóo y Abascal también se han producido como algo que entra "dentro de la normalidad". "Feijóo cree que es un error presentar la moción y yo creo que no es ningún error. Cada uno piensa una cosa y respetamos la estrategia del otro" dijo el líder de Vox en una comparecencia hace unos días en el Congreso.
No lastrar a la derecha
Cabe destacar que, para no lastrar las opciones electorales de la derecha, en Vox llevan tiempo eludiendo el choque directo con Feijóo, aunque en privado echan en falta más contundencia a la hora de confrontar al Gobierno. La formación de Abascal considera que la situación de España es "gravísima" y no puede haber dudas sobre quiénes conforman la verdadera alternativa.
Aunque Vox huye habitualmente de las encuestas, que considera instrumentos manejados por los partidos para influir en la opinión pública, fuentes del partido ya daban por amortizado el llamado efecto Feijóo a la vuelta del verano, a pesar de la crisis interna que vivió el partido tras la marcha de Macarena Olona.
El partido presume de no haber caído en ningún momento en número de afiliados y aseguran haber experimentado un crecimiento sostenido los últimos meses hasta rozar los 70.000. Viva 22 y la reacción que han tenido frente al "golpe al Estado de Pedro Sánchez" les ha permitido superar el bache andaluz en los sondeos, aunque su principal objetivo es siempre lograr sumar con el PP para echar al actual Gobierno de la Moncloa.