Las imágenes de una chica practicando sexo oral con un joven en medio de la pista en la discoteca Waka de Sant Quirze del Vallés, en Barcelona, se han vuelto virales al tiempo que la familia de la chica, de 16 años, ha denunciado ante los Mossos d'Esquadra una posible agresión sexual. En paralelo, el joven también ha presentado denuncia, en su caso por la difusión de las imágenes.
En dichas imágenes, que se han difundido a través de diversas redes sociales, como Tik Tok y Twitter, se puede apreciar como la menor practica una felación hasta que el joven se da cuenta de que están siendo grabados, aparta a la chica y se sube los pantalones. Los hechos se remontan al pasado viernes.
Según ha declarado a TV3 la madre de la menor, su hija habría sido víctima de un presunto caso de sumisión química, pues alega que tras pedir una consumición en la barra del establecimiento ya no recuerda nada de lo sucedido. Por esa razón, la familia decidió presentar denuncia por agresión sexual.
En esas mismas declaraciones, la madre asegura que su hija no conocía de nada al joven. También critica la actuación de los responsables de la discoteca porque, alega, no se interesaron por lo sucedido ni ayudaron a su hija. Por su parte, el joven ha denunciado la difusión de las imágenes sin consentimiento, lo que podría constituir un delito penado con hasta un año de cárcel.
Establecimiento conflictivo
Los hechos sucedieron en una discoteca que acumula polémicas por el comportamiento del personal de seguridad, en la que se han dado casos de violación y son frecuentes las peleas. En solo un año se registraron 160 actuaciones policiales, 36 detenciones, tres de ellas por violación, y al menos 46 agresiones, según datos de los Mossos d'Esquadra y la Policía Local.
Ni la Generalidad ni el Ayuntamiento de Sant Quirze del Vallés se habían planteado el cierre del establecimiento hasta la difusión de las imágenes de sexo oral en medio de la pista. Fuentes municipales alegan que no está entre sus competencias y que habían solicitado a la Generalidad que adoptara medidas sancionadoras, incluido el cierre.
El consejero de Interior, Joan Ignasi Elena, ha salido al paso de la polémica con el argumento de que los Mossos están actuando con "diligencia y determinación", ha recordado que la difusión de las imágenes es delito y que la discoteca funciona con una licencia municipal mientras que la Generalidad ha abierto un número indeterminado de expedientes a los propietarios del establecimiento.
La alcaldesa, Elisabeth Oliveras, también de ERC, ha exigido a la Generalidad que "ejerza sus competencias" para evitar que la discoteca siga siendo un foco de inseguridad donde se cometen todo tipo de delitos "de manera continuada".