
Milena Sánchez Castro era española, tenía 20 años, vivía en Alcalá de Henares y trabajaba como escort (acompañante de pago). La Policía Nacional halló su cadáver el pasado 28 de noviembre en el domicilio de su último cliente. Un varón de 53 años -Alfonso Fidel- que contrataba servicios de prostitución habitualmente. Tenía unos gustos sexuales un tanto peculiares, a la vista de lo que se encontró en una habitación -semioculta y bajo llave- en la que tenía escondido el cuerpo sin vida de la chica.
De las pesquisas se desprende que Milena, a la que se perdió el rastro el 22 de noviembre, pudo morir tres días después de su desaparición y un día antes de que su presunto asesino se quitara la vida. En ese tiempo, pasaron varias personas por la vivienda. Se cree que Alfonso Fidel incluso pudo llevar a otras trabajadoras sexuales a su casa después de haber cometido el crimen. Algo que plantea la posibilidad de que haya alguien que sepa más de lo que ha dicho acerca de lo que sucedió en aquella casa.
La hipótesis principal de los investigadores es que Milena fue asesinada por una única persona, el cliente que se suicidó. El informe preliminar de la autopsia señala que la chica murió por asfixia. Esto podría deberse a un juego sexual. Encaja con lo que otras mujeres con las que él solía quedar afirman que le gustaba. En cualquier caso, está por ver a qué se deben los golpes que presentaba su cuerpo, y si esas lesiones fueron ocasionadas antes o después de su fallecimiento.
A día de hoy, siguen quedando muchos interrogantes en el aire. La familia de la joven necesita respuestas. Su abogado, Juan Manuel Medina, trabaja para poder dárselas. "Hay que cerrar todas las puertas que pudieran considerarse abiertas", advierte en declaraciones a Libertad Digital. Se ha de comprobar si hubo o no terceras personas implicadas, y se han de aclarar las circunstancias de su muerte. Hay quien apunta que podría haber ocurrido durante un rito sexual extraño o incluso de carácter satánico. Veamos qué puede haber de cierto en ello.
¿Participaron más personas?
Sin duda, la incógnita más importante que se debe despejar es si pudo haber más personas implicadas en el fallecimiento de Milena. "Si realmente fue un hecho cometido solamente por esta la persona que se suicidó o si podría haber participado alguien más", señala Medina. No se deben dar cosas por sentadas.
"Hay muchas puertas abiertas y hay que cerrarlas. Hasta que no se haga, no descartamos la implicación de terceras personas", añade, "o que muriera en una práctica grupal". La intención del abogado no es otra que la de que se investiguen todos los cabos sueltos y -con ello- devolver algo de paz a la familia de la joven.
¿Ocultismo, ritos satánicos?
El caso está envuelto en un halo de misterio -por decirlo suavemente- que impide que los familiares de Milena puedan seguir adelante con sus vidas. Se ha hablado incluso de ocultismo y posibles rituales satánicos, aunque "de momento no hay ningún indicio" que apunte a que estos extremos estén relacionados con el crimen, nos recuerda Medina.
Lo que ha ocurrido es que han trascendido algunos detalles sórdidos de la vida sexual del presunto asesino que han alimentado todo tipo de teorías. Era fácil sacar conclusiones precipitadas. El varón tenía escrita en la pared de su salón la frase "Helter Skelter" (canción de los Beatles) de manera que sólo podía leerse con luz ultravioleta.
Cierto es que Charles Manson, criminal y líder de una siniestra secta que cometió una ola de asesinatos en el verano de 1969, dijo que la citada canción les había incitado a hacerlo. Pero que Alfonso Fidel tuviera esas palabras en su pared no es de extrañar si observamos otros elementos que se encontraron en la casa.
¿Qué pasó, realmente?
Analizando el hallazgo dentro del contexto o del perfil del presunto asesino, el abogado no cree que -como se ha apuntado en algunos medios- el crimen responda a que Alfonso Fidel quisiera emular a la ‘Familia Manson’, "ni nada parecido". Eso no quita que él crea que hay que llevar la investigación hasta sus últimas consecuencias.
Hay que tratar de saber exactamente qué ocurrió en aquella casa en la que se halló el cuerpo de Milene. Parece ser que "no falleció en la estancia en la que se encontró" el cadáver (en la que no había restos de sangre), pero sí en el domicilio. Hay que determinar dónde y en qué circunstancias. "Presentaba una serie de lesiones que no han sido explicadas".
Por otra parte, el que se considera autor del asesinato "pudo manipular la escena y limpiar lo que considerara". "Posiblemente la muerte de Milena se produce dentro de las 24/48 horas anteriores a que esta persona se suicidara, tuvo tiempo de sobra", explica Medina. Quizás cabría preguntarse para qué tomarse tantas molestias, si pensaba quitarse la vida.
¿Una muñeca hinchable?
El reguero de personas que entraron y salieron de aquella casa en los días previos y posteriores a la muerte de Milena, complica y mucho la investigación. "La escena se ha visto contaminada", señala Medina. Cabe recordar que en primer lugar se halló el cuerpo de Alfonso Fidel, ahorcado en su vivienda. Se trató como un suicidio y no se inspeccionó la habitación que estaba cerrada con llave.
No es hasta dos días después cuando la policía conecta al varón con la desaparición de la joven y acude de nuevo al domicilio. Durante ese tiempo, entra y sale gente. Entre ellos, familiares y amigos del fallecido. Dos de ellos incluso llegan a abrir la mencionada habitación cerrada con llave y uno de ellos ve a Milena. Se trata de un amigo de Alfonso Fidel.
Supuestamente, acudió a la casa con la exmujer de su amigo para recoger algunos efectos personales. Según dijo a la policía, no permitió que ella lo viera porque "no le iba a gustar". Él confundió el cadáver -asegura- "con una muñeca hinchable" y por eso no avisó a nadie de lo que había visto. "Tendrían que ampliar esa declaración y dar algunas explicaciones", considera el abogado.
No obstante, la autopsia y los resultados de otras pruebas pendientes serán determinantes para terminar de resolver el caso. "Es una investigación que sigue abierta a la espera de una serie de diligencias de instrucción que se están haciendo en este momento", señala Medina. "Haremos todo lo necesario para poder tener una serie de certezas lo más congruentes posible para determinar en qué circunstancias murió esta chica".