La situación de tensión entre Rusia y los países miembros de la OTAN desde el inicio de la invasión de Ucrania tiene su propio reflejo en los mares europeos. Un patrullero de la Armada española, el P-72 Centinela, se ha aproximado en las últimas horas a dos buques de guerra rusos que navegan en el Mediterráneo Occidental para monitorizar su paso por las aguas del Estrecho de Gibraltar y de soberanía española.
Las dos embarcaciones vienen navegando desde hace semanas desde el Mediterráneo Oriental. La fragata Admiral Kasatonov es una moderna embarcación multirol que entró en servicio en el año 2020 y que es una de las bases de la modernización de la Marina rusa. El buque cisterna Akademik Pashin, que también entró en servicio en 2020, le acompaña en su camino por aguas internacionales. Ambos están adscritos a la Flota del Norte rusa.
El movimiento del P72 Centinela está dentro de sus atribuciones en el marco de las Operaciones Permanentes de las Fuerzas Armadas, que están bajo control del Mando de Operaciones (MOPS) del Estado Mayor de la Defensa (EMAD), entre las que se encuentran las tareas de vigilancia y seguridad marítima en aguas del sur peninsular, con el objetivo de mantener presencia y garantizar los intereses nacionales en aguas de soberanía española.
Con una dotación de 40 personas, este patrullero de la Armada está diseñado para misiones de vigilancia y seguridad marítima. Está preparado para efectuar operaciones de interdicción marítima (visita, registro y, en su caso, apresamiento de buques) y prestar auxilio, rescate y asistencia en la mar en el caso de que se le requiera. Asimismo, es habitual su apoyo a otros organismos del Estado en la lucha contra la inmigración ilegal, narcotráfico y otras actividades delictivas.