Las amenazas y la incompetencia de las autoridades local y autonómica son el trasfondo del cambio de domicilio de la familia de la niña de 11 años que fue violada en el centro comercial Màgic de Badalona. Procedentes de Ghana, se tienen que marchar de la ciudad catalana, porque siguen sufriendo amenazas por parte de familiares y amigos de quienes fueron detenidos por esa atrocidad, tres de ellos de 13 años y los otros, entre los 14 y los 16 años.
Los implicados, que aparecían en el vídeo que circuló entre familias y alumnos de un instituto de Badalona, están en libertad. Son inimputables. Sólo un par de ellos estuvieron una semanas en un centro de la Dirección General de Atención a la Infancia y la Adolescencia (DGAIA). La violación se produjo el 19 de noviembre, pero no trascendió hasta primeros de marzo. Los padres supieron lo que había ocurrido cuando un hermano de la víctima les explicó que le habían hablado de un vídeo en el que su hermana era violada.
Ante el escándalo en los medios, tanto la Generalidad como el Ayuntamiento prometieron proteger a la víctima y a su familia, así como a los violadores por su condición de menores, según subrayó la consejera de Igualdad y Feminismo de la Generalidad, Tània Verge. Tanta "protección" no ha logrado evitar el acoso contra la familia de la niña, que con la "ayuda" de los servicios sociales del Ayuntamiento de Badalona gestionan el cambio de domicilio y de escuela. Según la periodista que informó del caso en TV3, la familia se va entre esta semana y la que viene y la madre de la víctima ha tenido que dejar el trabajo para acompañar a su hija al psiquiatra y para llevar el papeleo judicial. La menor declarará en junio ante la Fiscalía y eso será la prueba preconstituida en un procedimiento fantasma.
Mientras los autores de la violación siguen con sus vidas, las amenazas y la incompetencia de Ayuntamiento y Generalidad han logrado que sea la familia de la niña violada la que tenga que marcharse de Badalona para poder reconstruir sus vidas.
Pocos días después de que trascendiera este caso de violación grupal se informó de que el centro comercial había sido el escenario de otros crímenes sexuales. Una niña de 14 años y otra de 16 eran las víctimas de sendos casos de violación grupal. Las familias de las nuevas víctimas denuncian la pasividad de las autoridades y del centro comercial.