Extremadura tendrá cambio de Gobierno tras los últimos ocho años del socialista Guillermo Fernández Vara. El PP volverá a presidir la Junta extremeña como hizo entre 2011 y 2015 con José Antonio Monago. Sin embargo, en esta ocasión los populares de María Guardiola tendrán nuevos compañeros de viaje. PP y Vox han firmado un acuerdo programático para los próximos cuatro años y lo han escenificado con Guardiola y Ángel-Pelayo Gordillo, que han explicado las claves del mismo en una tensa rueda de prensa que ha servido a la futura presidenta regional para explicar su cambio de opinión.
María Guardiola lo ha resumido durante las cuestiones de los periodistas y ha dicho: "Mi palabra no es tan importante como el futuro de Extremadura". Antes, ha explicado que el acuerdo entre PP y Vox "va a garantizar que la voz de los extremeños se materialice en la formación de un nuevo Gobierno que termine con las políticas que han llevado a Extremadura a ocupar los últimos puestos de los rankings". Ha señalado que había que "dialogar, avanzar, seguir dialogando y sentarnos" para llegar "a puntos de encuentro". "Hemos apartado todo aquello que nos separa y hemos adaptado lo que nos une", ha indicado.
La líder popular extremeña ha dicho que "la prioridad" para ambas formaciones es "pasar página" de la "dejadez" del Gobierno de Fernández Vara porque los extremeños han "tenido que soportar el silencio cómplice" del expresidente socialista y "esa sumisión ante el Gobierno de Sánchez con infraestructuras del siglo pasado". "Por fin vamos a dejar atrás años de desprecios y agravios, muchos años en los que la Extremadura real no contaba para la oficial", ha añadido
"El cambio de ciclo político ha empezado a dar sus pasos", ha apuntado Guardiola que ha desvelado que el acuerdo con Vox cuenta con "nueve puntos y sesenta medidas" con un "único fin de mejorar la vida de los extremeños y hacer posible el desarrollo" de la región. Ha especificado que el "cumplimiento" del mismo "será revisado por un órgano de control y de seguimiento". También ha contado que el senador por designación autonómica "recaerá en un diputado de Vox" y que modificarán "el reglamento de la Asamblea para que haya representación de todos los grupos".
Este acuerdo con Vox es una "hoja de ruta para tener otro rumbo" y convertir a Extremadura en una "tierra de oportunidades" en la que "los jóvenes no tengan que marcharse". Además, Guardiola ha dicho que con Vox "nos une mucho más de lo que nos separa" y se pueda construir un cambio "sobre la base de medidas" con "menos impuestos, mejores servicios públicos, respaldar a las empresas, autónomos" y también a "las familias, el campo y nuestras tradiciones". Precisamente, es en ese campo en el que se engloba el puesto en el Gobierno que tendrán los de Santiago Abascal con la consejería de Gestión Forestal y Mundo Rural.
Guardiola ha dicho que servirá para "frenar la inercia de estos años en Extremadura" y que ella se compromete a servir a los extremeños con "ilusión y mucha humildad" y con "un Gobierno sin rodillo, sin tutela y sin censura". "Este acuerdo también es fruto de un proceso de reflexión en el que he decidido optar por el interés de los extremeños. Es un buen acuerdo, sensato, de moderación, de respeto a nuestra autonómica y en el que no retrocede en los derechos conseguidos y ganan los que nos han votado y los que no. Por todos, sin color político, voy a trabajar intensamente para ofrecer esta Extremadura que merecen", ha añadido.
Un "día histórico"
El candidato de Vox a la presidencia de Extremadura, Ángel-Pelayo Gordillo, ha calificado el acto de la firma con el PP como "un día histórico porque por fin los extremeños han decidido un cambio político en Extremadura". Sobre el acuerdo ha dicho que se ha realizado "siempre buscando el bien de los hombres y las mujeres de Extremadura y con un espíritu de lealtad y colaboración". "La responsabilidad de ambos partidos no podía truncar el deseo de los extremeños a que se materialice este cambio", ha apuntado.
Gordillo ha señalado que "el cambio ha llegado a Extremadura por fin" y que habrá un "impulso reformistas" para la región. Ha prometido que se dejarán "la piel" para que "Extremadura empiece a funcionar" y "que vengan proyectos". Ha dicho que habrá "una reforma fiscal en profundidad" y políticas "para que la convivencia de los extremeños se solidifique". Además, ha dicho que "tiene la mano tendida a todos los extremeños" y que trabajarán "por todos y para todos". "Se ha impuesto la sensatez por ambas partes, hemos sido generosos todos y ha triunfado la cordura", ha indicado el candidato de Vox.
"Mi palabra no es tan importante"
La rueda de prensa posterior ha estado centrada en el cambio de opinión de la líder popular extremeña y en cuestiones como la "violencia machista". María Guardiola ha dicho que en el acuerdo hay "rechazo a cualquier discurso machista". También ha indicado que la decisión de pactar con Vox "se toma en Extremadura" y que ella ha sido "muy libre de tomar la decisión".
Ese cambio de parecer en Guardiola se ha debido "a un profundo proceso de reflexión que me ha obligado a mí misma a ir al origen de por qué quise ser candidata. He recordado que di un paso al frente porque lo que quería es hacer que mi tierra prosperase. Mi palabra no es tan importante como el futuro de Extremadura". Cree que "esto se ha utilizado de forma torticera" y ha asegurado que sus "principios siguen intactos". "Es un acuerdo de consenso y soy muy consciente de la decepción que puede generar en muchos españoles. Yo creo que es preferible que me frustre yo a que se frustre el futuro de los extremeños", ha indicado. También ha dicho que ella no ha "mentido nunca" y que sus "principios son los mismos y lo que he hecho es dialogar. Tiene que ser un éxito colectivo. En ese punto estoy en el querer construir una sociedad más próspera, con valores, y he llegado a la conclusión que eso se consigue al no rendirme" y ha dicho que espera que se le "juzgue como presidenta de la Junta de Extremadura".
Sobre sus palabras contra Vox que llevaron a la ruptura de las negociaciones con el partido de Santiago Abascal ha dicho que "fueron fruto de un enfado y una frustración". María Guardiola ha añadido que ella no asume "los postulados de Vox ni Vox los del PP" y que ambos "hacemos renuncias desde la generosidad". También ha indicado que "nunca" presentó la dimisión y que es "consciente de que hay mucha gente que esperaba eso pero hubieran salido ganando todos aquellos que quieren que en esta tierra siga todo igual".
Ángel-Pelayo Gordillo ha dicho en la rueda de prensa que PP y Vox son "partidos distintos" y que "una negociación se basa en cesiones mutuas, ambos hemos sido generosos". Ha apuntado que Vox "respeta absolutamente cualquier tendencia sexual" y que condenan "todo tipo de violencia". Sobre las polémicas palabras del concejal de Mérida sobre la bandera LGTBI se ha desmarcado de las mismas aunque ha dicho que "hay que tener un poco de comprensión con un persona que lleva poco tiempo en el cargo de concejal y que se ha podido equivocar. Nadie de Vox ha querido equiparar cualquier tendencia sexual con un comportamiento deshonroso o delictivo".