
El PNV camina hacia su fracaso y derrota frente a Bildu. Y lo hace siguiendo los pasos de CiU, un partido absorbido bajo la parodia golpista de Junts y su líder prófugo y delincuente, Carles Puigdemont. Las bases del PNV más clásicas y ligadas al mundo empresarial han advertido ya de esta evidencia, pero, mientras, el partido no deja de dar pasos hacia su derrota frente a la formación de Arnaldo Otegi. El último movimiento ha sido el acuerdo unitario alcanzado por el PNV con Bildu y el PSE-PSOE para renovar EUDEL, la Asociación de Municipios Vascos. Y es que el PNV ni siquiera ha pretendido disputar el creciente control a Bildu.
El PNV, EH Bildu, y el PSE-PSOE se han unido en un pacto de candidatura única a las agrupaciones independientes para aupar como presidenta de la institución a Esther Apraiz, alcaldesa de Derio, y como vicepresidentes a Nagore Alkorta, primera edil de Azpeitia, y a José Antonio Santano, regidor de Irún. Apraiz es del PNV, cierto. Pero su pacto le deja las manos atadas a los deseos de Bildu y los socialistas. Alkorta es de Bildu y Santano socialista. Y el temor del PNV a enfrentarse a una derrota le ha llevado a aceptar la candidatura única.
La Asociación de Municipios Vascos, EUDEL, no es cualquier cosa. Cuenta con el respaldo de 245 municipios. La Asociación de Municipios Vascos tiene como objetivos "la defensa de la autonomía municipal, la representación de los intereses locales ante otras Instituciones, y la coordinación y dinamización de acciones para la cohesión de los Ayuntamientos Vascos, fomentando el intercambio de sus experiencias y la difusión de sus buenas prácticas", según su propia documentación. Y todo ello le confiere una gran capacidad de influencia política.
La Asociación fue fundada en 1982 y está integrada por gran parte de los Municipios de la Comunidad Autónoma Vasca y por algunos de la Comunidad Foral de Navarra. Y ello implica la capacidad de promoción de la buscada absorción de Navarra por el País Vasco por Bildu y PNV.
Pero, además, el poder de Bildu en la Asociación se une al conseguido en la Mancomunidad de Pamplona. Se trata de todo un epicentro de poder, influencia y presupuesto que gestiona desde la recogida de residuos domésticos, hasta el agua, las cuestiones ambientales, el parque fluvial de la comarca o la atención ciudadana. Y lo hace en los 50 municipios de la Comarca de Pamplona.
La presidencia de esta mancomunidad seguirá en manos del supuesto independiente David Campión después de que EH Bildu, Independientes, Geroa Bai y Contigo (otra fuerza cercana a los postulados de Bildu y cuajada de antiguos políticos de EA, uno de los fundadores de Bildu) hayan alcanzado recientemente otro acuerdo.
El acuerdo incluye desde la creación de un equipo de gobierno, en el que participarán las tres fuerzas políticas y los independientes, que será, según su versión, abierto a todos los grupos que "tengan una visión constructiva y progresista de desarrollo de las líneas de este acuerdo programático" –es decir, ellos y los socialistas–; hasta un programa de mejora de los servicios de la mancomunidad. Pero la cuestión de fondo es que, 32 de los 54 representantes municipales de la Asamblea General de la Mancomunidad, permitirán este pacto con Bildu como gran impulsor.
Hay que recordar cómo llegó Campión a la presidencia de esta Mancomunidad. Campión Ventura es el alcalde de una localidad de poco más de 400 habitantes –Valle de Ollo– y en septiembre de 2019 se convirtió en el nuevo presidente del organismo de la Comarca de Pamplona, después de resultar elegido en la Asamblea General celebrada en la sede de la entidad aquel mes.