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Puigdemont insulta a los jueces del Supremo: "La Toga Nostra"

El independentismo carga contra el Supremo, al que acusa de un "golpe de Estado judicial" por no amnistiar la malversación

El independentismo carga contra el Supremo, al que acusa de un "golpe de Estado judicial" por no amnistiar la malversación
Carles Puigdemont | Europa Press

"La Toga Nostra". Con esas palabras ha reaccionado Carles Puigdemont a la decisión del Tribunal Supremo de excluir la malversación de los efectos de la amnistía. La resolución de los jueces del llamado "procés" ha soliviantado al independentismo. Así, una de sus organizaciones de referencia, Òmnium Cultural, llega a tachar la decisión de "golpe de Estado judicial".

La orden de detención de Carles Puigdemont, que pretendía regresar a España para asistir a la primera sesión de investidura del parlamento catalán, se mantiene por el cargo de malversación, que tras la reforma del Código Penal pactada entre el PSOE y ERC, implica un mínimo de entre cuatro y seis años de prisión. De este modo, el prófugo ve muy limitada su capacidad de maniobra. El PSC llegó a un acuerdo la semana pasada con los grupos independentistas para facilitar el voto delegado o telemático de Puigdemont, pero si pretende ser investido debería, en teoría, personarse en la cámara catalana, lo que podría propiciar su inmediata detención para ser llevado ante la justicia.

Al poco de conocer la decisión del instructor de la causa del golpe de Estado separatista, Puigdemont ha escrito "La Toga Nostra", una alusión al crimen organizado con la que pretende tratar a los jueces de mafiosos. Más elaborada ha sido la reacción de Òmnium: "Se confirma el golpe de Estado judicial. El Tribunal Supremo se salta la ley para perseguir, criminalizar y condenar al independentismo. ¡No pasarán!".

El presidente del parlamento catalán, Josep Rull, también condenado por el 1-O, pero no por malversación, ha escrito en la red social X que "negar la amnistía es una nueva infamia de la cúpula judicial española, que se atribuye un rol político impropio en un Estado de derecho. De nuevo ratifico mi determinación de hacer respetar los derechos de los diputados del Parlament, incluidos el derecho a votar y a ser votado".

Cabe la posibilidad de que Junts intente una investidura de Puigdemont con el expresidente en Waterloo, aunque esa maniobra ya se probó en 2018, tras las elecciones del 155, pero fue abortada por ERC, cuyo dirigente Roger Torrent presidía la cámara.

Quien no se ha manifestado todavía es Oriol Junqueras, uno de los afectados por la decisión del juez Llarena. Sí que lo ha hecho la republicana Carme Forcadell, expresidenta del parlamento que también condenada.

Según Forcadell, la decisión es "una prueba más de la venganza de los jueces del Supremo contra el independentismo. Es infame y vergonzoso que digan que hubo enriquecimiento personal, es una mentira absolutamente inmoral. La unidad de España por delante de todo, de la justicia y de la democracia".

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