
Un desastre sobre otro desastre. La campaña de falsa bandera organizada desde ERC contra los hermanos Maragall cuando Ernest se presentaba a la alcaldía de Barcelona por ese mismo partido es un filón que cada día suma un nuevo capítulo para vergüenza de la dirección del partido. La historia se ha cobrado la cabeza de Sergi Sabrià, que dimitió el jueves como viceconsejero de Estrategia y Comunicación de la Generalidad. Sin embargo, negó haber sido el inspirador de la campaña o haberla autorizado.
ERC no predica con el ejemplo en materia de transparencia. De lo que se sabe del partido la historia se habría terminado con la dimisión de Sabrià como responsable de la maquinaria de "operaciones especiales" de ERC, una especie de entramado orgánico pero sin cargos ni atribuciones públicas. Se dijo también que quienes colgaron los carteles no habían cobrado, que se habían pedido disculpas a Ernest Maragall, tras lo que retiró la denuncia, y que todo partía de un militante de comarcas con vagas conexiones en la sede barcelonesa del partido.
Pues no. Los tres jóvenes que colgaron los carteles, tres vecinos de Igualada de 21, 22 y 24 años, se han llevado más de cincuenta mil euros por el encargo y sus posteriores complicaciones, según detalla La Vanguardia. Los Mossos tienen acreditados pagos de una empresa vinculada a ERC, Relevance Marketing SL, a estos individuos a través de facturas falsas que giraba uno de los jóvenes al que un "dirigente de ERC" le dijo que se diera de alta como autónomo. Se le proporcionó también una Iphone 13 y se le dieron instrucciones para que se comunicara a través de una aplicación de mensajería que destruye los mensajes inmediatamente.
Una casualidad
Las imágenes de los tres jóvenes encargados por ERC de colgar unos carteles con las fotos de Pasqual y Ernest Maragall y la leyenda "Fora l'Alzheimer de Barcelona" fueron captada por unas cámaras de seguridad enfocadas hacia la calle y difundidas por los Mossos. En una identificación por una trifulca en un local de ocio nocturno fue localizado y detenido uno de los jóvenes, que enseguida dio detalles a los agentes del caso de la campaña de ERC.
A partir de ahí el vaciado de los dispositivos electrónicos de los investigados arrojó toda la información relativa a los pagos de ERC. Los jóvenes pidieron más dinero a raíz de la difusión de las fotos y lograron sacar a la dirección de ERC cuatro mil euros por colgar los carteles y cincuenta mil euros por su silencio. El negocio de las cabras desde la perspectiva de ERC. Los hechos se remontan a marzo del año pasado, en la precampaña de las municipales, cuando Oriol Junqueras tenía el control absoluto de la formación.
Los jóvenes tuvieron que pasar por los juzgados y fueron asistidos por la misma abogada, contratada por ERC. Los Mossos, según explica La Vanguardia, no han logrado obtener ningún nombre de algún dirigente de ERC en concreto. Como se sabe, los policías autonómicos dependen de la consejería de Interior, en manos de ERC.