"El poder también se sufre", señaló melodramático en el pasado Comité Federal del PSOE el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que lleva meses de victimización porque un juez ha decidido (osado, pensará el presidente) abrir una investigación sobre su mujer, Begoña Gómez, acusada de tráfico de influencias y corrupción en los negocios. Además, el caso de su hermano David Sánchez y sus chanchullos en la Diputación de Badajoz, o la resistencia dentro del PSOE al cupo catalán, la financiación singular que se ha ofrecido a ERC para que apoyase la investidura de Salvador Illa como presidente de la Generalidad. A todo ello hay que sumarle el caso Koldo-Ábalos. Un panorama muy complicado.
Pero para eso están los amigos, y Tezanos lo es. Entre tantos sinsabores que le provoca la fachosfera política, mediática y judicial, los barómetros del CIS son de las pocas alegrías que recibe Sánchez. Y el de este mes no sólo le da como ganador, sino que el PSOE amplía su distancia con el PP.
Sin que nadie pueda entender qué ha pasado en este último mes que haya podido impulsar a Pedro Sánchez en su intención de voto, el CIS de José Luis Tezanos certifica que el PSOE ha aumentado su ventaja sobre el PP en 4,5 puntos. El motivo es que el respaldo al partido de Alberto Núñez Feijóo ha caído en 1,7 puntos. El CIS concede una estimación de voto del 33 por ciento a los socialistas y del 28,5 a los populares.
¿Por qué no disuelve y convoca elecciones?
Si Sánchez se creyese la encuesta de su amigo Tezanos disolvería las Cortes inmediatamente y llamaría a los españoles a las urnas, en lugar de seguir renqueando pleno a pleno, sin poder aprobar ninguna ley. Ayer volvió a perder una votación en el Congreso, y van ya 35.
La encuesta, elaborada a partir de 4.027 entrevistas del 2 al 6 de septiembre, apunta a una subida de 0,9 puntos de Vox respecto al anterior barómetro de julio, hasta conseguir el 13,1 por ciento, y una subida de Sumar de 1,2 puntos, al lograr el 7,8 por ciento.
El despegue del PSOE se debe únicamente a la pérdida de apoyos que sufre el PP porque los socialistas solo ganan una décima respecto al voto estimado que recogió el muestro de julio del CIS.
En plena arremetida del Gboierno también contra las encuestadoras privadas, el CIS vuelve a publicar un barómetro absolutamente excéntrico con respecto a las encuestas elaboradas por empresas privadas. Pero hay que vigilar a las privadas. Este Gobierno lo mismo suelta un bulo sobre Teresa Ribera que te lanza un CIS como el de este mes, que no hace sino hundir aún más el prestigio de la institución.