
La actuación de la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ) está en la picota desde el mismo martes 29 de octubre. Más allá de los planes y actuaciones que se deberían haber puesto en marcha estos años y no se han hecho su actuación aquel aciago día deja mucho que desear.
La CHJ, que depende del Ministerio de Transición Ecológica, desactivó tres veces la alerta de peligro de desbordamientos en el barranco del Poyo, que fue el que provocó la inmensa mayoría de víctimas mortales: a las 13.00, a las 14.00 y a las 16.00 horas, y no avisó hasta las 18.43 horas.
No obstante, esa alerta lanzada vía email pasó desapercibida en el CECOPI (Centro de Coordinación de Emergencias y Protección Civil), puesto en marcha a las 17.00 horas y en el que participaron también el presidente de la CHJ, Miguel Polo Cebellán, y su equipo, que tampoco dijeron nada de esta alerta lanzada a las 18.43. Sobre esto, la CHJ argumentó después que nadie del Gobierno valenciano les solicitó información al respecto y que ellos se encargan de los ríos y presas, pero que los barrancos son competencia de la Generalidad.
Miguel Polo Cebellán es ingeniero de Caminos, Canales y Puertos y fue concejal del PSOE en el Ayuntamiento de Titaguas (Valencia) entre 2007 y 2011. Fue nombrado comisario de Aguas de la CHJ en 2018 y la preside desde 2021. Entre las funciones de la Confederación está el facilitar los datos de los caudales de su demarcación hidrográfica. Es decir, la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) traslada las lluvias, la CHJ convierte esas lluvias en caudales, y el 112 es el que avisa a la población.
Según informa el diario Las Provincias, Polo no ha ofrecido explicación alguna respecto a esta falta de información en ese CECOPI respecto al barranco del Poyo. Tampoco ha aclarado las razones por las que las obras de encauzamiento del barranco del Poyo y de la Saleta, declaradas como prioritarias ya en 2016 –bajo gobierno de Mariano Rajoy- no han sufrido impulso desde entonces, tampoco bajo su gestión desde febrero de 2021.
Así las cosas, Manos Limpias ha incluido a Polo en su denuncia contra los responsables de la mala gestión de la DANA y sostiene que la Confederación dispone de la herramienta SAIH (Sistema Automático de Información Hidrológica) que "no funcionó correctamente" y que CHJ "pudo haber detectado y alarmado de la avenida que venía".
Según denunció VozPopuli, el PSOE ha ido estos años colonizando también estas Confederaciones Hidrográficas, que son los organismos encargados de las cuencas hidrográficas que transcurren por más de una comunidad autónoma. En España hay nueve, adscritas al Ministerio que dirige en estos momentos Teresa Ribera.
Sus presidentes son cargos de confianza nombrados por los Gobiernos del PSOE y del PP. Pero hasta agosto de 2018 tenían formación y trayectoria para el cargo, recuerda este medio, que destaca entre todos el caso de Joaquín Páez, presidente de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir, también exconcejal del PSOE y activista en redes contra el PP, pero de trayectoria ajena al sector, a diferencia de los presidentes de las Confederaciones del Júcar y del Tajo. En las primarias del 2016 se significó dando su apoyo a Sánchez.
Polo también habría sido señalado, según recuerda Las Provincias, por su incapacidad para impulsar actuaciones en infraestructuras hidrológicas pero, en cambio, sí hacer obras de teatro o impulsar debates sobre ética o Franco.