El Gobierno evitó en todo momento utilizar el término “españolizar” para referirse a la reforma educativa en marcha, pero yendo al fondo de la cuestión dejó clara su opinión de que, hoy por hoy, no se permiten las libertades individuales de los estudiantes -en especial en Cataluña- y que la actual administración no está dispuesta a mirar para otro lado.
En privado, el Ejecutivo afirma que tal vez José Ignacio Wert se pasara de frenada no utilizando “los términos más idóneos”, pero recalcan que sobre el terreno lleva bastante razón. Y la lleva, destacan, porque echando un vistazo a los libros de historia o de geografía de determinadas comunidades “te das cuentan de que priorizan casi al 100% lo regional y dan de lado al resto del Estado”. Un extremo que, avanzan, cambiará con la nueva norma que ya está en la mesa de los sectores implicados.
“Le voy a decir para qué estamos los Gobierno, y en concreto el Gobierno de España. Está para defender los derechos de los ciudadanos, sus libertades y derechos individuales. No hay nada por encima de esos derechos y nuestra obligación es protegerlos y defenderlos”, respondió la vicepresidenta, preguntada la término del Consejo de Ministros. Insistió: “Hay que proteger el derecho de libertad de educación” y “no imponer ninguna opción”.
El Ejecutivo, afirman, es consciente de que en Cataluña no sólo es que no se cumplan las resoluciones judiciales en materia lingüística, sino que en líneas generales “se borra a España”. De ahí que, en plena polémica y con todas las ediciones digitales abriendo con las palabras de Wert, Mariano Rajoy apelara desde París a una educación de la que los jóvenes salgan sintiéndose “orgullosos” de ser españoles y catalanes por igual.
Soraya Sáenz de Santamaría también entró en el rifirrafe político, toda vez desde la Generalidad se censuró formalmente al ministro: “”Lo que tiene que tener muy presentes es un clima de buena convivencia”, dijo. Porque, argumentó, los gobiernos “no nos justificamos por nosotros mismos, sino por la libertad”. Eso sí, no quiso asumir el término “españolizar”.
Un bandera, la de la libertad, que dijo que cubrirá a todo el conjunto nacional, sin excepciones. Y esto debería de ser todo un aviso a navegantes para otras comunidades -en esta ocasión gobernadas por el PP- en la que también se cometen abusos. En concreto, Comunidad Valenciana e Islas Baleares. “Hay que garantizar los derechos individuales en todo el territorio nacional, de todos los españoles. Es importante que se atienda la libertad sobre la educación de sus hijos y trabajemos hacia un equilibrio”. Y la base, enfatizó, está meridianamente clara: “Los fundamentos de la Constitución española” así como la libertad “de opinar de una u otra manera”.